Política cambiaria favorece contrabando: Industria prevé menor crecimiento para este año

El sector invirtió en pasadas gestiones $us 240 millones, en promedio, generando más de 650.000 empleos y contribuyó con 18 por ciento en las recaudaciones tributarias. Sin embargo, su participación en la formación del Producto Interno Bruto (PIB) se estancó en las últimas tres décadas

De acuerdo con el analista económico Hugo Siles, la industria manufacturera del país crecerá menos en 2016, respecto de su comportamiento registrado en los años anteriores. Las importaciones legales o ilegales de bienes manufacturados afectarán al sector, que se encuentra con crecimiento estancado en las tres últimas décadas. Su aporte al Producto Interno Bruto (PIB) se mantiene en 16 por ciento. Estima que el crecimiento sectorial de 2015 estaría por debajo del 4 por ciento.

LEVE CRECIMIENTO

Según datos de la Cámara Nacional de Industria, el sector creció en promedio por encima del 5 por ciento, entre 2013 y 2014; sin embargo, la cifra se redujo al 4 por ciento para la gestión pasada y se estima que será aún menor para este año.

Las cifras poco alentadoras señalan que la desindustrialización afecta al sector. Los créditos al sector industrial manufacturero no mostraron cambios significativos en los últimos años.

El analista económico señaló que en 2013 el crecimiento del sector alcanzó a 5,82, pero ya en 2014 disminuyó a 4,2 por ciento, y ahora se estima que el dato que registrará 2015 sería entorno al 4 por ciento, y en 2016 el indicador sería menor.

INSTITUCIONALIDAD

Al cierre de gestión de 2015, el presidente de la Cámara Nacional de Industria (CNI), Mario Yaffar, informó que el sector perdió competitividad. Atribuyó ello a la falta de institucionalidad en las entidades públicas y a la ausencia de políticas claras que permitan sustentar el crecimiento del sector productivo formal.

MÍNIMA CUANTÍA

En esa misma tónica, el presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Julio Roda, demandó al Gobierno hace un mes, derogar las importaciones de mínima cuantía, porque en su opinión son un canal que permite al contrabando internar productos foráneos, procedentes de Argentina, principalmente.

Roda, sin embargo, se abstuvo de referirse a la modificación de las políticas cambiarias del Ejecutivo, pero puntualizó que la producción nacional requiere de “protección” del Estado.

COTRABANDO

La internación de productos manufacturados al territorio nacional, a precios bajos, ya sea legal o ilegalmente, también implicó pérdidas a la industria nacional; los incentivos sociales que otorgó el Gobierno para dinamizar el mercado nacional no tuvieron efectos positivos en las empresas. Al contrario, dijo Yaffar, alentó la importación; el tipo de cambio fijo provocó una masiva compra de productos procedentes de los mercados extranjeros, puntualizó.

Al igual que la Cámara Nacional de Comercio (CNC), los industriales señalaron que el sector sufre los efectos de la desaceleración económica mundial y la devaluación de las monedas de los países vecinos. Yaffar sostuvo que este hecho provocó el ingreso masivo de mercadería, tanto legal como ilegal.

SECTORES

Los sectores mayormente afectados por la desaceleración de la industria son alimentos y bebidas alcohólicas y no alcohólicas, textiles, madera, cuero, plásticos y farmacéutica.

COSTOS LABORALES

Según el economista Darío Monasterio, en el país el comercio tiene mejores opciones de crecer en relación a la industria; los altos costos laborales y la presión fiscal que se ejercen sobre el sector le restan competitividad.

Peor todavía, advirtió que la presión tributaria provocará el cierre de empresas formales y dará lugar a la informalidad. Ante esta perspectiva tan negativa, sugirió ampliar la base tributaria.

INVERSIONES

Una reciente evaluación del sector señala que la industria nacional invirtió en años anteriores $us 240 millones, en promedio anual, generando más de 650.000 empleos y contribuyó con 18 por ciento en las recaudaciones tributarias. Su participación en la formación del Producto Interno Bruto (PIB) se estancó en las últimas tres décadas en 16 por ciento.