El presidente Evo Morales aseguró que la norma busca garantizar el abastecimiento de alimentos a la población.
Los productos que están prohibidos de vender en el exterior son: animales de la especie bovina, carne de res, carne de pollo, trigo, maíz, arroz, harina de trigo y azúcar.
Según el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Bolivia vende 3.266 toneladas de carnes de res y de pollo, 2.999 de trigo, 24.787 de maíz y 5.701 de arroz.
Para atender el consumo interno, el decreto también libera de aranceles la importación de animales de la especie bovina, carne de res, carne de pollo, trigo, maíz, arroz, harina de trigo, aceites, grasas vegetales y azúcar, porque son los alimentos más caros en el mercado y algunos de ellos subieron entre un 10 y un 100 por ciento los últimos meses.
La medida junto al fondo de fomento productivo de 600 millones de dólares, creado la semana pasada, buscan contener la inflación, que en el primer mes de este año llegó a 1,09 por ciento. La meta anual es del 7,07 por ciento.
Los ministros de Desarrollo Rural, Agropecuario y Medio Ambiente, y de Producción y Microempresa, Susana Rivero y Javier Hurtado, respectivamente, explicaron que la medida no tiene el propósito de impedir la actividad productiva nacional a cargo de los empresarios. Aseguraron que lo que quiere es garantizar primero el abastecimiento local, dado el delicado panorama económico y los desastres naturales.
Hurtado, quien durante mucho tiempo dirigió la fábrica de alimentos Irupana, sostuvo que en este momento los empresarios deberían pensar primero en el mercado interno antes que en sus ganancias.
La Ministra estableció que no se trata de prohibir la exportación en general, tampoco se están cerrando las fronteras, menos la exportación de productos como la soya, harina, aceites o de otras áreas. “Estamos hablando de los rubros alimenticios en los que en este momento existe sensibilidad”.
Rivero declaró: “Todos los empresarios bolivianos deben trabajar primero por su país, porque la política del Gobierno es priorizar la seguridad alimentaria”.
Informes al gabinete
El decreto contempla mecanismos de vigilancia en el transporte y la venta en fronteras con ayuda de los militares. “Habrá un duro control del contrabando —aseguró Rivero— con la participación de las Fuerzas Armadas, de la Policía y del Control Operativo Aduanero”.
Para ello, el Ministerio de Producción y Microempresa elaborará un mapa de riesgos para determinar las posibles zonas de salida de alimentos.
La Ministra agregó: “Vamos a incidir en la lucha contra el contrabando de alimentos que en estos periodos se agudiza, especialmente al Perú, Chile y otros países. El contrabando está creciendo”.
La salida ilícita y la especulación son delitos que están sancionados en el Código Penal, penados con uno a seis años.
El decreto establece que la Aduana Nacional, las Fuerzas Armadas y la Fiscalía deberán emitir informes sobre los controles y entregarlos al gabinete.
El ministro Hurtado argumentó que en este momento existe una crisis mundial alimentaria y que en todos los casos los gobiernos priorizan su seguridad en este sentido y luego el mercado externo.
“Ésta no es una medida extraordinaria, sino normal en todos los países en los que siempre se ha privilegiado el consumo nacional. Lo extraordinario es que en Bolivia no contábamos con un mecanismo legal que en momentos de emergencia y necesarios se active para asegurar la seguridad alimentaria”.
Añadió que con la prohibición de exportaciones y la importación de alimentos, el compromiso fundamental del Gobierno es dar un efectivo impulso a la producción nacional en todos los rubros agrícolas.
La ministra Rivero aclaró que la decisión de prohibir las exportaciones es de contingencia y temporal, y que la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) también dará frutos en sus primeras acciones.
Los exportadores cuestionan la prohibición
Gary Rodríguez
Gerente IBCE
“La medida del Gobierno, de cerrar las exportaciones, es una decisión que la tomamos con sorpresa y terminará estrangulando al sector exportador que ya sufre por la diferencia del tipo de cambio. Es una decisión que no dio resultados en el pasado inmediato y ahora se la vuelve a dictaminar. El Ejecutivo lo que debe hacer es controlar su excesivo gasto fiscal para de esa forma controlar la inflación a través del incremento de la oferta nacional”.
Mauricio Roca
Presidente CAO
“En vez de limitar las exportaciones, lo que el Gobierno tiene que hacer es impulsar la producción nacional, que se logra con el compromiso del sector público que es el que está fallando. Esto se volverá en manejo político tapando la ineficiencia económica. Lo que está haciendo el Presidente es matar la producción nacional y más bien se debería coordinar más con los sectores productivos previendo la escasez de algunos productos”.
Oswaldo Barriga
Líder de la Camex Santa Cruz
“Lo que se debería hacer es un plan de abastecimiento. El decreto aprobado por el Gobierno es pésimo. No podemos asumir que se nos prohíban las exportaciones. Adicionalmente a eso, la decisión está en contra de la ley y generará desempleo. Si esto no se revierte, hay empresas que nos han expresado que tendrían que cerrar sus puertas porque sólo producen para exportar. En vez de promover la productividad, se la castiga”.
Guido Nayar
Presidente Fegasacruz
“Este decreto en el fondo demuestra que es una ignorancia, especialmente en el tema de la ganadería. Simplemente se busca dar una señal de que el Gobierno está protegiendo el mercado interno. Piensan que asfixiando la ganadería podrán tener tierras para repartir a sus militantes. El sector de la ganadería está siendo castigado también por una decisión política y no sólo por los desastres naturales. Vamos a adoptar una determinación como sector ganadero”.
Rolando Zabala
Gerente Anapo
“Justo en este momento cuando empieza la cosecha de arroceros y están queriendo comenzar los maiceros y los soyeros es que el Gobierno asume una determinación unilateral y sin consulta con el sector productivo nacional. Se ocasionará que haya una sobreoferta en el mercado por algunos meses. Eso hará que bajen los precios y que los productores nacionales tengan que competir con la importación de los países vecinos que no pagarán arancel”.
La vigilancia del transporte y la comercialización de alimentos se efectuará desde hoy.
Las Fuerzas Armadas formarán equipos de control en las fronteras.
La Policía y la Intendencia Municipal evitarán el agio y la especulación.