El informe corresponde a la directora general ejecutiva de esta entidad, Marianela Prada Tejada, quien destacó la importancia de la administración de los puertos donde hay presencia boliviana.
La ASP-B es una entidad pública descentralizada, sin fines de lucro, dependiente del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas. Es la entidad estatal oficial acreditada por el Gobierno boliviano en los puertos y lugares habilitados y por habilitarse, para el tránsito de mercaderías desde y hacia Bolivia.
La ASP-B tuvo altibajos en la generación de ingresos. Prada Tejada explicó que en 2008 generaron 34 millones de bolivianos; en 2009, los ingresos bajaron a 31 millones; en 2010 subieron a 48 millones. Hoy, se observa una tendencia al alza porque hasta noviembre de 2011, los ingresos subieron a 54 millones. En estos cuatro años recaudó un total de 167 millones de bolivianos.
Estos recursos generados por la ASP-B tienen un solo destino: se invierten en el funcionamiento de sus oficinas, en territorio nacional e internacional, porque la entidad se autosostiene y funciona con recursos propios, explicó la autoridad.
Los principales puertos donde Bolivia tiene presencia física son: Arica y Antofagasta en Chile, Ilo y Matarani en el Perú, el puerto de Rosario en Argentina y el puerto Villeta en Paraguay. En puerto Uruguay no tiene presencia física, pero existen facilidades otorgadas por éste en sus puertos de Nueva Palmira y Montevideo.
Aproximadamente 30 servidores públicos trabajan en estos puertos, de los cuales el 75% se encuentra en Arica, debido a que en este lugar se halla el mayor movimiento de carga.
Respecto al volumen de carga de mercaderías que pasa por la ASP-B, fundamentalmente corresponde al ingreso de las compras bolivianas (importaciones). En Arica se movieron unas 857 mil toneladas métricas de carga durante el año pasado y 957 mil toneladas métricas en 2001, hasta octubre.
Prada precisó que a la par que se produce la cantidad del movimiento de carga, también esto significa una importante generación de recursos.
Servicios. La ASP-B brinda servicios de importación y exportación. En las importaciones de mercadería se encarga de la recepción, verificación, custodia, control, almacenamiento y certificación de todo tipo de mercaderías de tránsito de Bolivia.
Además realizan la desconsolidación de contenedores, fraccionamiento de los despachantes de Importación, estiba y desestiba de carga, porteo y acopio en almacén, despacho de carga al destino y en la empresa de transporte elegida por el importador.
Al exportador boliviano le brindan servicios en la planificación e internación de empresas de transporte al puerto, descarga de camión o ferrocarril, recepción, verificación, control y elaboración de la póliza de tránsito, consolidación de la mercadería, traslado a la zona stacking en coordinación con líneas navieras, y envío de documentación al exportador.
Es importante señalar que las tareas de manipuleo de carga en los puertos donde está establecida, las realiza mediante la contratación o subcontratación de los servicios indicados, como lo establece la norma de creación y la reorganización de la ASP-B.
“Los puertos son muy importantes para nuestro comercio exterior, y como Gobierno nacional, estamos trabajando en una propuesta de un modelo portuario para nuestro país, el cual lamentablemente nunca ha existido; quizás por nuestra condición de país enclaustrado no se pensó en una política de desarrollo portuario, con un carácter geopolítico comercial”, reflexionó la directora general ejecutiva de la Administración de Servicios Portuarios de Bolivia (ASP-B).
Bolivia tiene dos temas pendientes
El mayor flujo de comercio se produce por el puerto de Arica y básicamente por mercadería boliviana tanto de importación como de exportación.
Bolivia había planteado inicialmente el statu quo de tarifas portuarias hasta que no se resuelvan los problemas que afectan al libre tránsito y dejar sin efecto la nueva modalidad de cobro para los contenedores cerrados FCL/FCL. Esto fue fruto de una reunión entre el Grupo Técnico Bilateral (Arica) encabezado por la ASP-B y por la Empresa Portuaria Arica (EPA).
Sin embargo, no hubo resultados favorables, es así que la ASP-B solicitó elevar el tratamiento, por ello se realiza la XII Reunión del Grupo de Trabajo de Libre Tránsito, en el que además de los dos anteriores planteamientos, la delegación boliviana presidida por el Ministerio de Relaciones Exteriores, a través del Director de Relaciones Bilaterales, solicitó dos cosas puntuales: la administración del Puerto de Arica y la administración del ferrocarril.
Bolivia elevó el tema al Mecanismo de Consultas Políticas que se trata a nivel de vicencancilleres de ambos países. Hasta el momento se aguarda la respuesta chilena.
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