Productos con bajo valor agregado. Mendieta indicó que el país exporta productos sin valor agregado que representa más del 85% de su comercio exterior. "El proceso de avance en la producción de bienes con valor agregado se ha estancado a pesar de la inversión realizada", expresó.
Por región. El grado de industrialización en cada región es desigual, Santa Cruz tiene más alto nivel con un 18%, mientras que en el otro extremo llega a tan solo 3% en Potosí.
Otro indicador que muestra la baja industrialización es que en el país hay 4,7 empresas manufactureras por cada 100 mil habitantes. En Bolivia se transforman principalmente los alimentos, plásticos y textiles.
Mendieta puso como ejemplo que Bolivia y Finlandia son ricos en recursos naturales. “Bolivia está en la periferia en diversificación de productos de complejidad productiva; Finlandia tiene artículos de mayor complejidad”, apuntó. Una de las pruebas de ello es la especialización de Finlandia en la producción de celulares de alta calidad. En este país europeo nació Nokia, que hasta hace unos años era el principal fabricante de móviles.
Las causas. Para el economista Teófilo Caballero, este bajo nivel en la industrialización, se da porque el país tiene pésimos niveles de productividad, problemas de infraestructura y logística, "No ha habido políticas de Estado para consolidar grandes proyectos industriales, además aquí juega mucho el factor tecnológico que nosotros no manejamos, que por lo general está en manos de los inversionistas extranjeros", expresó. Agregó que en los últimos años en Bolivia no se han generado condiciones para que fluya la inversión extranjera.
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