Un residuo altamente codiciado. La parte blanquecina que permanece líquida al coagularse la leche (cuajada), se ha convertido en una industria de miles de millones de dólares. Lo que durante muchos años fue considerado un residuo, ahora es un producto codiciado como fuente natural de proteínas que sirve como complemento proteínico para culturistas o ancianos o incluso para las leches infantiles.
Valor nutritivo. Para la nutricionista cruceña, Martha Tarifa, el suero o cuajadilla, es una fuente que ofrece muchas calorías; tiene poca grasa, mucho hidrato de carbono y principalmente vitamina B, C, D y E, además de minerales, como el fósforo, calcio, magnesio, potasio, manganeso y sodio.
Gracias a sus beneficios tanto depurativos como desintoxicantes, ayuda en la eliminación de las toxinas de forma completamente natural. Es favorable a su vez para el buen funcionamiento del hígado y del riñón.
Tiene un interesante efecto prebiótico, lo que significa que además de ayudar en la prevención del estreñimiento, es beneficiosa para mantener una flora intestinal en buen estado.
Desperdicio del producto. Para hacer un kilo de queso se necesitan 10 litros de leche, o sea que se desperdicia entre 8 a 9 litros de suero, explica Valverde.
Actualmente, la industria PIL, es la única que hace uso provechoso del suero en la elaboración de jugos, ya que no existe la tecnología adecuada para su aprovechamiento industrial. La Universidad Mayor de San Andrés y Proleche se hallan realizando estudios para usar la cuajada en la industria.
Propiedades
Enfermedades. El suero es útil contra la diabetes, hipoglucemias, colesterol e hipertensión. Es antioxidante y ayuda a bajar de peso previniendo los ataques de ansiedad por la comida.
Defensas. Puede aumentar las defensas ya que la proteína Whey o suero de leche es muy rica en inmunoglobulinas que actúan sobre el sistema inmunológico.
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