Viernes del pasado 4 de octubre, una cena es el escenario del acercamiento entre el presidente Evo Morales y los empresarios cochabambinos, que exponen su Visión de Desarrollo del Sector Empresarial Cochabambino para la Agenda Patriótica 2025.
Concluida la cena, Morales vuelca el sartén. La reunión no fue para escuchar cuestiones administrativas. "Yo quería escuchar qué y cómo los empresarios cochabambinos quieren invertir y ver al departamento en 2025 (…). No estoy conforme con esta propuesta, quiero más para Cochabamba”, dice.
Dos economistas consultados por este medio (Roberto Laserna yPablo Cuba) coinciden en que efectivamente la propuesta cochabambina es poco ambiciosa, pero la atribuyen a distintas causas.
Para el economista Roberto Laserna, el problema de la “visión” de la FEPC es que trata de acomodarse a la Agenda Patriótica 2025, y como ésta es muy imprecisa y general, además de poner énfasis estatista de desarrollo, cualquier intento de acomodarse a esta agenda pecará de lo mismo.
Según Laserna, “la experiencia histórica ha demostrado que el Estado puede tener un rol importante en los procesos de desarrollo, pero jamás reemplazando la iniciativa y creatividad de la gente. Es éste el principal motor del desarrollo, pero la Agenda 2025 no lo reconoce así. Tampoco el intento de la FEPC de aportar a esa agenda desde la región, a pesar de que se trata de un documento que es mucho más concreto, operativo y viable que la Agenda nacional”.
Laserna agrega que para que una propuesta de desarrollo tenga visión de largo plazo y la ambición necesaria para estimular a la gente, debe identificar y remover los obstáculos que la propia gente enfrenta para pensar su desarrollo y asumir un papel activo y protagónico en su construcción. "Es la gente la que genera desarrollo. No el dinero, ni la infraestructura, ni el Estado, ni los gremios. La gente, trabajando, invirtiendo, produciendo y consumiendo”, agrega.
Por su parte, el economista Pablo Cuba considera que el documento del empresariado carece de ambición por dos razones, entre otras: primero, se trata de una visión sectorial de desarrollo, una demanda de los empresarios que parece no tomar en cuenta a otros sectores económicos que también hacen desarrollo, y segundo, parece más un conjunto de demandas al Estado sin mencionar lo que ellos como empresarios están dispuestos a dar.
Entre otros aspectos, Cuba observa que el documento de la FEPC no aborda el tema del déficit institucional, tampoco considera la proyección autonómica y deja de lado el problema del desempleo "como si éste fuera un asunto que se resolverá per se".
OPINAN DOS ECONOMISTAS
Roberto Laserna
"Visión estatista"
El documento de la FEPC muestra que han hecho un esfuerzo de adecuar su perspectiva a la visión planteada por la Agenda 2025, propuesta por el Gobierno para definir una visión de largo plazo. El reclamo del Presidente, sobre la falta de ambición en el documento de la FEPC, tal vez se explique por esa razón. La Agenda 2025 es imprecisa y general, pero sobre todo peca por el excesivo énfasis del Estado en el desarrollo. Cualquier esfuerzo de integrarse a esa visión caerá en lo mismo, porque pecará de carencia de ambición inherente a las visiones estatistas del desarrollo.
Pablo Cuba
"Visión muy sectorial"
La visión de los empresarios está muy limitada a su propio sector. No mira a la región como un conjunto de actores sociales (microempresarios, sector agropecuario), parece ser sólo una demanda de recursos, y en ninguna parte se habla, por ejemplo en zonas francas, de las inversiones que ellos estarían dispuestos a hacer. Tampoco hacen referencia a la debilidad institucional que existe en la región. Se deben fortalecer las actividades económicas desde una nueva perspectiva, por ejemplo, articular el sector privado con mercados nacionales e internacionales.
Empresarios
En el documento, los empresarios cochabambinos piden condiciones para un crecimiento económico del departamento de 6 por ciento anual para llegar a 2025 con 17 por ciento de aporte al PIB.
Identifican seis potencialidades para reactivar el aparato productivo: industria, turismo, salud y educación superior, tecnología, logística para comercio internacional y el sector forestal.
Piden que el Parque Industrial de Santiváñez sea centro logístico, seguridad para inversiones, lucha contra el contrabando, reducir la presión fiscal y otros.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario