La industria turística del trópico de Cochabamba está siendo duramente golpeada por el dengue. La enfermedad ha ahuyentado a los turistas justo en una época alta para la región y son los hoteles los más afectados.
Los 62 establecimientos de hospedaje que existen en el municipio de Villa Tunari se declararon en "alerta roja" por las pérdidas registradas en los dos últimos dos meses ante la drástica reducción de visitantes nacionales y extranjeros.
Pero no son sólo los hoteles los afectados. Los restaurantes ubicados en la zona y las empresas de guía turística también sufren el embate.
Durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo, los hoteles del trópico tuvieron una ocupación del 80 por ciento de su capacidad instalada. En enero, el porcentaje de ocupación bajó drásticamente hasta el 7 por ciento y en febrero llegó al 2 por ciento, informó María Antonieta Quiroga, presidenta honoraria de la Asociación Hotelera del Trópico de Cochabamba.
Dijo, como ejemplo, que durante el fin de semana de Carnaval, el hotel Surubí, de su propiedad, hospedó solamente a tres visitantes que estaban en tránsito a Santa Cruz por una noche. En otros hoteles, hostales y alojamientos, el porcentaje de ocupación fue casi cero.
“Parece que nadie frena en avance de la epidemia del dengue. Actualmente no tenemos recursos para pagar la luz, ni los sueldos. Estamos despachando a algunos empleados y nuestra economía está en alerta roja”, indicó Quiroga.
Agregó que en su establecimiento, que tiene capacidad para albergar cómodamente hasta 95 personas, “desde enero a la fecha no se vende nada y los turistas han desaparecido; ya no llegan por temor a contraer la mortal enfermedad”.
Quiroga dijo que este fin de semana tenía que llegar a Villa Tunari un grupo de turistas chilenos, que después de permanecer algunos días en Oruro y tras enterarse de los decesos provocados por el dengue en el trópico, canceló su visita de una semana.
Previsiones
Una mayoría de los establecimientos hoteleros de la zona tomó previsiones para combatir la propagación de la epidemia como el fumigado de todas sus instalaciones y la instalación de equipos de primeros auxilios para garantizar la seguridad de los huéspedes.
Autoridades de salud informaron que hasta el jueves serán fumigados contra la epidemia las viviendas, calles, sendas, huertas, establecimientos públicos y privados de los municipios de Villa Tunari y Paracti.
“Mientras continúe lloviendo y al día siguiente haga sol, el rebrote de la epidemia es constante”, indicó la presidenta honoraria de la Asociación Hotelera del Trópico, que espera mayor efectividad de las autoridades de salud para frenar y erradicar la epidemia que ha cobrado vidas.
La Asociación Hotelera del Trópico agrupa a 62 establecimientos de hospedaje, solamente en el municipio de Villa Tunari. En conjunto, los hoteles tienen capacidad instalada de 1.900 camas para prestar servicios de hospedaje, alimentación y visitas a los turistas que visitan la zona.
PERJUICIO
Los restaurantes del trópico también se ven afectados por la epidemia. Muchos de ellos subieron sus precios para intentar compensar en algo las pérdidas.
Las empresas de guía turística están prácticamente sin actividad. Los paseos a los parques naturales y ríos están prácticamente suspendidos.
Esperan Semana Santa
Los establecimientos hoteleros del trópico de Cochabamba esperan para las primeras semanas de abril la llegada de las corrientes frías del sur, conocidas como “surazo”, y los feriados por Semana Santa, del 9 y 10 de abril, como opciones para recuperarse de las pérdidas económicas registradas en los últimos dos meses.
La única forma de combatir e incluso erradicar la epidemia del dengue son los surazos que bajan la temperaturas del trópico abruptamente de 32 a 14 grados centígrados, provocando la muerte natural de los insectos transmisores, dijo Maria Antonieta Quiroga, dirigente de los hoteleros.
“Considerando que a muchos nos fue bien en Navidad y Año Nuevo, podemos sobrevivir unos tres meses”, explicó.
Los 62 establecimientos de hospedaje que existen en el municipio de Villa Tunari se declararon en "alerta roja" por las pérdidas registradas en los dos últimos dos meses ante la drástica reducción de visitantes nacionales y extranjeros.
Pero no son sólo los hoteles los afectados. Los restaurantes ubicados en la zona y las empresas de guía turística también sufren el embate.
Durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo, los hoteles del trópico tuvieron una ocupación del 80 por ciento de su capacidad instalada. En enero, el porcentaje de ocupación bajó drásticamente hasta el 7 por ciento y en febrero llegó al 2 por ciento, informó María Antonieta Quiroga, presidenta honoraria de la Asociación Hotelera del Trópico de Cochabamba.
Dijo, como ejemplo, que durante el fin de semana de Carnaval, el hotel Surubí, de su propiedad, hospedó solamente a tres visitantes que estaban en tránsito a Santa Cruz por una noche. En otros hoteles, hostales y alojamientos, el porcentaje de ocupación fue casi cero.
“Parece que nadie frena en avance de la epidemia del dengue. Actualmente no tenemos recursos para pagar la luz, ni los sueldos. Estamos despachando a algunos empleados y nuestra economía está en alerta roja”, indicó Quiroga.
Agregó que en su establecimiento, que tiene capacidad para albergar cómodamente hasta 95 personas, “desde enero a la fecha no se vende nada y los turistas han desaparecido; ya no llegan por temor a contraer la mortal enfermedad”.
Quiroga dijo que este fin de semana tenía que llegar a Villa Tunari un grupo de turistas chilenos, que después de permanecer algunos días en Oruro y tras enterarse de los decesos provocados por el dengue en el trópico, canceló su visita de una semana.
Previsiones
Una mayoría de los establecimientos hoteleros de la zona tomó previsiones para combatir la propagación de la epidemia como el fumigado de todas sus instalaciones y la instalación de equipos de primeros auxilios para garantizar la seguridad de los huéspedes.
Autoridades de salud informaron que hasta el jueves serán fumigados contra la epidemia las viviendas, calles, sendas, huertas, establecimientos públicos y privados de los municipios de Villa Tunari y Paracti.
“Mientras continúe lloviendo y al día siguiente haga sol, el rebrote de la epidemia es constante”, indicó la presidenta honoraria de la Asociación Hotelera del Trópico, que espera mayor efectividad de las autoridades de salud para frenar y erradicar la epidemia que ha cobrado vidas.
La Asociación Hotelera del Trópico agrupa a 62 establecimientos de hospedaje, solamente en el municipio de Villa Tunari. En conjunto, los hoteles tienen capacidad instalada de 1.900 camas para prestar servicios de hospedaje, alimentación y visitas a los turistas que visitan la zona.
PERJUICIO
Los restaurantes del trópico también se ven afectados por la epidemia. Muchos de ellos subieron sus precios para intentar compensar en algo las pérdidas.
Las empresas de guía turística están prácticamente sin actividad. Los paseos a los parques naturales y ríos están prácticamente suspendidos.
Esperan Semana Santa
Los establecimientos hoteleros del trópico de Cochabamba esperan para las primeras semanas de abril la llegada de las corrientes frías del sur, conocidas como “surazo”, y los feriados por Semana Santa, del 9 y 10 de abril, como opciones para recuperarse de las pérdidas económicas registradas en los últimos dos meses.
La única forma de combatir e incluso erradicar la epidemia del dengue son los surazos que bajan la temperaturas del trópico abruptamente de 32 a 14 grados centígrados, provocando la muerte natural de los insectos transmisores, dijo Maria Antonieta Quiroga, dirigente de los hoteleros.
“Considerando que a muchos nos fue bien en Navidad y Año Nuevo, podemos sobrevivir unos tres meses”, explicó.
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