La imagen con la que los supermercados empezaron a operar en el país hace casi un cuarto de siglo —con productos de comida casi todos importados y precios inalcanzables para la mayoría de la población, en resumen un negocio elitista— ha dado un giro de muchos grados.
Para comenzar, el negocio ha crecido a un ritmo si bien no acelerado, constante. En 24 años —la edad que tiene Gava Market, el primer supermercado de La Paz— se ha abierto una treintena de salas de estos centros de expendio y se han consolidado tres cadenas: Ketal (con presencia sólo en la sede de gobierno), Hipermaxi y Fidalga (con sucursales en las tres ciudades del eje troncal).
Los tamaños de estas salas oscilan entre los 400 y 2.400 metros cuadrados, donde se ofrece una gran variedad de productos, pero no sólo del rubro de la comida —que ha dejado de ser sólo de importación— sino también del hogar, decorativos, ropa, textiles, joyas y cuidado estético en general.
A ello se suma la democratización en el acceso a estos servicios, lo que tiene que ver directamente con la introducción de precios cada vez más competitivos en relación al mercado informal, cuya competencia es desleal y en desigualdad de condiciones. Según un estudio reciente de la Asociación de Supermercados y Autoservicios de Bolivia, el índice de cobertura de mercado del negocio es del 28 por ciento al 30 de marzo de este año, es decir que tres de 10 personas que compran en mercados lo hacen en los súper. “Esto, entre otros, se expresa en un crecimiento en los últimos dos años del tres y cuatro por ciento”, dice Ramiro Beltrán, presidente de dicha Asociación y gerente propietario de Gava Market.
Un nivel aceptable pero todavía bajo respecto al de otros países, como Chile, que tiene el 70 por ciento, y Perú con el 50 por ciento de penetración de mercado, complementa Jorge Rojas, gerente comercial de Ketal.
El otro cambio es que se han convertido en complejos comerciales donde no sólo se venden productos, sino también se ofertan servicios, desde financieros hasta recreativos. Un ejemplo de ello son los súper con entidades bancarias y salas de cine, internet y plazas de comidas. Por lo que hoy se habla de otro concepto, el de multiservicio. ¿Cómo y por qué se dieron estos cambios? Veamos qué dicen los protagonistas.
Una coincidencia general es que en este lapso hubo un cambio en los hábitos de consumo de los clientes. Ahora se valora cada vez más la presentación y calidad del producto, la higiene, el servicio, la variedad y el poder acceder a una factura, sostienen Beltrán y Rojas.
Para comenzar, el negocio ha crecido a un ritmo si bien no acelerado, constante. En 24 años —la edad que tiene Gava Market, el primer supermercado de La Paz— se ha abierto una treintena de salas de estos centros de expendio y se han consolidado tres cadenas: Ketal (con presencia sólo en la sede de gobierno), Hipermaxi y Fidalga (con sucursales en las tres ciudades del eje troncal).
Los tamaños de estas salas oscilan entre los 400 y 2.400 metros cuadrados, donde se ofrece una gran variedad de productos, pero no sólo del rubro de la comida —que ha dejado de ser sólo de importación— sino también del hogar, decorativos, ropa, textiles, joyas y cuidado estético en general.
A ello se suma la democratización en el acceso a estos servicios, lo que tiene que ver directamente con la introducción de precios cada vez más competitivos en relación al mercado informal, cuya competencia es desleal y en desigualdad de condiciones. Según un estudio reciente de la Asociación de Supermercados y Autoservicios de Bolivia, el índice de cobertura de mercado del negocio es del 28 por ciento al 30 de marzo de este año, es decir que tres de 10 personas que compran en mercados lo hacen en los súper. “Esto, entre otros, se expresa en un crecimiento en los últimos dos años del tres y cuatro por ciento”, dice Ramiro Beltrán, presidente de dicha Asociación y gerente propietario de Gava Market.
Un nivel aceptable pero todavía bajo respecto al de otros países, como Chile, que tiene el 70 por ciento, y Perú con el 50 por ciento de penetración de mercado, complementa Jorge Rojas, gerente comercial de Ketal.
El otro cambio es que se han convertido en complejos comerciales donde no sólo se venden productos, sino también se ofertan servicios, desde financieros hasta recreativos. Un ejemplo de ello son los súper con entidades bancarias y salas de cine, internet y plazas de comidas. Por lo que hoy se habla de otro concepto, el de multiservicio. ¿Cómo y por qué se dieron estos cambios? Veamos qué dicen los protagonistas.
Una coincidencia general es que en este lapso hubo un cambio en los hábitos de consumo de los clientes. Ahora se valora cada vez más la presentación y calidad del producto, la higiene, el servicio, la variedad y el poder acceder a una factura, sostienen Beltrán y Rojas.
Éste último cree que quienes aprecian más estos atributos son los más jóvenes. A Beltrán y Rojas se suman Carla Barrero, gerente comercial regional de Hipermaxi, y Orlando Peña, gerente administrativo y financiero de Fidalga.
La otra variación tiene que ver con un cambio en el enfoque del negocio que antes, como dice Rojas, era más de marca que de volumen. Esto se plasmaba en precios considerablemente más elevados que el mercado informal.
Hoy esto ha cambiado, el súper es un negocio de volumen, hay más clientes y en consecuencia los precios bajaron, al grado, en algunos casos, de ser inferiores a los del mercado informal. “El supermercadismo en sus inicios fue muy elitista, no le interesaba tener pocos clientes pero sí precios elevados”, dice Barrero.
Este cambio de enfoque se debe a que el supermercado ha dejado de ser —como se dijo— sólo un centro de venta de comida para pasar a ofrecer la línea de la denominada de non food.
“Fidalga fue la pionera en este cambio hace más o menos ocho años, fruto de ello tenemos una fuerte presencia en productos de línea blanca, juguetería, ferretería, adornos y librería”, asegura Peña.
Se ha logrado romper el paradigma de la venta exclusiva de alimentos y se ha diversificado la oferta de productos, coinciden los representantes de Ketal, Hipermaxi, Fidalga y Gava Market.
Todo ello ha aportado para que el negocio de los supermercados crezca, aunque todavía con enormes desafíos y potencial, sobre todo en La Paz, que tiene un índice de penetración de mercado inferior al de Santa Cruz, dice Rojas.
Gava Market y SAS son pioneros en La Paz y Sucre
El Gava Market y el SAS, en La Paz y en Sucre, respectivamente, fueron los primeros en abrir una sala de supermercado en su región. El primero hace nada menos que 24 años y el segundo hace menos de un año.
Puede decirse que la historia del Gava es la historia del supermercadismo en el país y en particular en La Paz, donde fue el pionero en el negocio incluso sobre las hoy grandes cadenas.
“Desde entonces, afortunadamente, el proceso de captación de clientes siempre fue subiendo”, dice su gerente propietario, Ramiro Beltrán, para quien el secreto no sólo del Gava sino del resto de los supermercados está en la calidad de los productos que se expenden, su correcto y limpio manipuleo, la emisión de facturas y los precios competitivos.
Al igual que el resto de los súper, el Gava ha logrado diversificar su oferta: de ser un mercado que sólo vendía productos estadounidenses y europeos se ha convertido en una ventana también de artículos nacionales.
El SAS, por su parte, es un emprendimiento privado con capitales locales, que surge con el fin de satisfacer las necesidades de su clientela no sólo en la venta tradicional de productos alimenticios, sino del llamado multiservicio que va desde la compra de ropa, artículos para el hogar hasta la facilidad de realizar transacciones bancarias, como destaca su gerente, José Antonio Jiménez.
En efecto, el SAS ofrece la facilidad de realizar trámites bancarios, pagar las facturas de los servicios básicos, incluso tiene una farmacia, internet y salas de cine.
Las tres cadenas más grandes de supermercados del país
KETAL
Historia • Tiene 21 años en el mercado paceño, al que abastece con ocho salas: cinco Ketal y tres Extra, construidas entre 400 y 2.500 metros cuadrados.
Importado • La primera de sus salas fue levantada en Sopocachi, donde se vendían sólo productos importados, por lo que la mayoría de los clientes eran extranjeros.
Polo • Posteriormente, a mediados de la década del 80, se compró la sala de la calle 21 de Calacoto. Alrededor de este centro se generó un polo comercial.
Cambio • La siguiente sala en abrirse fue la que está ubicada en la 15 de Calacoto, donde se empezaron a vender otros productos además de comida.
Productos • Entre los productos más vendidos están los cárnicos, lácteos, fiambres (elaborados en una fábrica propia), pan industrial, pastas y pastelería.
Personal • Actualmente cuenta con 400 empleados en sus ocho salas. Se calcula que atiende regularmente a 50 mil clientes regulares. El próximo año abrirá una megasala en Irpavi.
HIPERMAXI
Historia • Está en el mercado nacional durante 14 años, ahora con presencia en todo el eje troncal. Tiene seis salas en Santa Cruz, tres en La Paz y una en Cochabamba.
Desarrollo • Comenzó con una sucursal en Santa Cruz. En 1997 amplió el negocio con otra sucursal en La Paz, donde abrirá una nueva megasala el próximo año.
Espacioso • Cuenta con algunas de las salas más amplias, entre ellas la que se encuentra en el Parque Industrial de Santa Cruz, con 3.600 metros cuadrados.
Productos • Entre los principales productos nacionales que vende destaca ropa y textiles. Cuenta con una fábrica de embutidos y fiambres ubicada en Santa Cruz.
Variedad • Presenta en sus distintas salas un sector denominado sabores del mundo con productos importados desde el Brasil, Italia y Estados Unidos.
Personal • Actualmente emplea de manera directa a 1.500 personas y genera alrededor de 2.000 empleos indirectos. Abre promociones regulares en las festividades de Carnaval, San Juan y Navidad.
FIDALGA
Historia • Tiene 15 años en el mercado cruceño y seis meses en el paceño. Tiene previsto llegar al mercado cochabambino con dos salas en proyección.
Sucursales • Cuenta con siete salas en Santa Cruz y cuatro en La Paz. Las más amplias están en el oriente con una superficie de entre 1.700 a 2.000 metros cuadrados.
Productos • Cuenta con siete salas en Santa Cruz y cuatro en La Paz. Las más amplias están en el oriente con una superficie de entre 1.700 a 2.000 metros cuadrados.
Productos • Entre los productos que más se vende se encuentran los cárnicos, los lácteos, los abarrotes, la juguetería además de lo clasificados en la línea blanca.
Presencia • Las salas en la ciudad de la Paz, en la que tiene presencia desde este año, se hallan en la plaza Abaroa, en Obrajes, en Miraflores y en Sopocachi.
Promociones • Las temporadas en las que más venta hay son Navidad, Carnaval y días festivos como el Día de la Madre y el Día del Padre, afirma el gerente administrativo y financiero, Orlando Peña.
Buenos dias quisiera saber con quien debo dirigirme y que requisitos piden para ofrecerles un producto espero su respuesta muchas gracias
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