Si se tratara de un edificio de departamentos, en esta estructura podrían habilitarse 40 pisos.
Esta torre de precalentamiento forma parte de la segunda línea de producción que construye Coboce en la localidad de Irpa Irpa, a 64 kilómetros de Cochabamba.
Dicha edificación, una vez que esté concluida, será la más alta de Bolivia, afirmó el gerente de Coboce Cemento, ingeniero José Manuel Ramírez.
Una vez que se concluya la construcción de esta segunda línea de producción, en 2011, Coboce Cemento será la cementera más grande del país, con una producción de 75 mil bolsas diarias.
La Cooperativa Boliviana de Cemento, Industrias y Servicios (Coboce Ltda) asumió el reto de convertirse en la cementera más grande del país y para este propósito está invirtiendo 71 millones de dólares.
Coboce nació con un capital de 1.600 dólares y en 43 años de vida se ha convertido en la Cooperativa más importante a nivel nacional.
La ampliación
El jefe de producción de Coboce Irpa Irpa, ingeniero Javier Ramallo, y el asistente de Planificación y Control de Obra, Julián Escóbar, explicaron a OPINIÓN detalles de la implementación de la segunda línea.
Para esta segunda línea se está construyendo un molino de crudo que tendrá una capacidad para moler 160 toneladas, por hora, de piedra caliza homogeneizada.
La piedra caliza que constituye el 90 por ciento, se muele con arcilla (lutita) y mineral de hierro, que son las materias primas para producir la “harina cruda”.
Una vez que se ha molido la piedra caliza, este material se transporta a un silo de almacenamiento que tendrá una capacidad de 7.000 toneladas.
Este primer silo de almacenamiento tiene una altura de 71 metros y un diámetro de 14.
La obra de mayor magnitud en este segunda línea es la torre de precalentamiento que es una estructura de 121 metros de altura.
A esta torre se llevará la “harina cruda” y se elevará la temperatura de 60 grados centígrados a 900, aproximadamente.
De la torre de precalentamiento, la materia prima pasa al horno, donde la “harina” se cuece a 1.400 grados centígrados.
Este nuevo horno tendrá una longitud de 70 metros y 4,60 de diámetro.
En el horno rotatorio se elabora el clinker que pasa a un silo de almacenamiento que tendrá una capacidad de 45 mil toneladas.
El molino de bolas para esta segunda línea de producción ya está en funcionamiento. Tiene una longitud de 13,5 metros y 4,6 de diámetro.
La capacidad nominal de producción de este nuevo molino es de 85 toneladas por hora.
En el proyecto completo de la segunda línea de producción se instalará un molino gemelo con una capacidad similar.
A este molino llega el clinker, el yeso y la puzolana. Estas tres materias primas se juntan, se mezclan y se muelen.
La segunda línea tendrá además silos de almacenamiento de cemento, cada uno con capacidad para 5.000 toneladas, es decir, 100 mil bolsas de cemento.
Cada uno de estos silos tiene un sistema de cono invertido, lo que permite vaciar hasta el 99 por ciento del material, a diferencia de lo que ocurría con los antiguos silos que dejaban una merma de hasta el 10 por ciento, tienen una altura de 30 metros y 16 de diámetro.
De los silos de almacenamiento, el cemento se transporta mediante cintas hasta el sector de envasado, desde donde finalmente se despacha al cliente en bolsas de 50 kilos.
La segunda línea de producción de la fábrica de cemento tendrá una capacidad de producir 1.600 toneladas de clinker por día, pero con la ampliación se duplicará la misma a 3.200.
Personal calificado
Coboce cuenta con personal altamente calificado en todas las áreas.
En esta ampliación trabajan ingenieros químicos, mecánicos, electromecánicos y eléctricos.
La implementación de la segunda
línea cuesta 71 millones de dólares
El gerente de Coboce Cemento, ingeniero José Manuel Ramírez, afirmó que realizar una inversión de 71 millones de dólares para la implementación de una segunda línea en la fábrica es un orgullo para la Cooperativa, lo que además le permitirá llegar a otros mercados del país.
Ramírez explicó que implementar esta segunda línea de producción es en la práctica construir otra fábrica.
La producción de cemento se triplicará, de 25 mil bolsas diarias a 75 mil, una vez que se concluya la ampliación en 2011.
“Despachar al mercado 75 mil bolsas cada día es un reto y se va a requerir de una gran logística, además que vamos a dinamizar la economía de Cochabamba”, afirmó.
Coboce está instalando un gran taller de metal mecánica para fabricar los implementos de metal que se requieren para la ampliación.
En este taller mecánico se podrán fabricar ciclones de 20 metros de altura y de 18 toneladas para la torre de precalentamiento.
Ningún otro taller en Cochabamba podría fabricar estas estructuras metálicas.
La Empresa Constructora Cochabamba (Eccsa) es la unidad que se está haciendo cargo de las obras civiles de la segunda línea.
“Estamos trabajando en familia, tanto en la parte de metal mecánica, obras civiles, montaje, vamos a ser nosotros los responsables de ejecutar esta gran obra”, afirmó Ramírez.
Producción
La fábrica de cemento produce con su primera línea 1.000 toneladas de clinker por día, y con la segunda se garantiza hasta 3.200 toneladas más.
“Y estoy seguro que cuando inauguremos la segunda fábrica vamos a producir cerca de 5.000 toneladas de clinker por día”, afirmó Ramírez.
Empleos
Coboce Irpa Irpa tiene en su planilla a 550 trabajadores, aproximadamente, y de este total, 440 están en la planta de Irpa Irpa. Otras 140 personas se benefician con empleos por el sistema terciarizado.
La ampliación, con sus tres frentes de trabajo está empleando a más de cien personas. Cuando se ingrese a trabajar en cinco frentes de trabajo, el número de trabajadores subirá a 800.
Una vez que se concluya la ampliación se requerirá entre 120 a 150 trabajadores.
La meta de Coboce es generar empleos estables y con sueldos que permita a sus trabajadores vivir con dignidad.
Ramírez explicó que por cada empleo directo que se genera en Coboce Cemento, otras diez personas se benefician con ingresos económicos, desde los transportistas, vendedores, comerciantes e intermediarios.
“Por eso considero que estamos con el pie derecho en la ampliación, porque nos permitirá proyectarnos como Coboce Cemento a nivel nacional”, afirmó.
El gerente de la unidad afirmó que Coboce produce el cemento de mejor calidad del país porque cuenta con profesionales y obreros altamente calificados.
Ramírez afirmó que manejar una fábrica de última tecnología ya es un desafío y el reto es hacerlo con profesionales bolivianos y obreros que están participando en el proceso de ampliación.
Ramírez explicó que Irpa Irpa y Capinota y otras comunidades se benefician con la presencia de la fábrica de cemento en el lugar y han logrado su desarrollo gracias a esta Cooperativa.
Trabajadores, profesionales y ejecutivos
le ponen el hombro a la Cooperativa
Los trabajadores de Coboce Cemento están identificados con su empresa, por eso trabajan desinteresadamente para que la Cooperativa crezca y siga adelante
El director titular del Consejo de Administración y secretario general del Sindicato de Coboce Irpa Irpa, Wálter Tórrez, afirmó que considera a la empresa como su segundo hogar.
Tórrez recordó que trabaja en Coboce Cemento desde hace 41 años y en todo este tiempo fue testigo de los cambios que tuvo la Cooperativa. Empezó a trabajar en la empresa como operador de equipo pesado y se mantiene en la Cooperativa desde esa fecha.
El dirigente recordó que nadie es “dueño” de la Cooperativa, porque todos, trabajadores y socios “son militantes de la empresa”.
Destacó que en la Cooperativa todos tienen el mismo valor, desde el gerente general hasta el último de los trabajadores y el trato entre ellos es respetuoso, como hermanos.
El dirigente afirmó que todos los trabajadores de la Cooperativa están altamente capacitados porque cursan talleres y seminarios de cooperativismo.
Los profesionales y obreros que trabajan en Irpa Irpa están identificados con la Cooperativa, y dan todo de sí, sin que nadie les recuerde sus obligaciones, complementó.
Recordó que Coboce nació de la nada, con una pequeña fábrica, cuyo impulsor fue el ingeniero Jaime Méndez.
El dirigente recordó que en una primera ampliación se logró subir la producción de cemento de 100 mil toneladas anuales a 300 mil.
Con la implementación de la segunda línea, Coboce Cemento se convertirá en la cementera más grande del país.
Wálter Tórrez destacó el apoyo de los trabajadores a la empresa que “siempre le ponen el hombro a la cooperativa” porque en los primeros años recibía su sueldo en cemento, y en una oportunidad regalaron una semana de haber.
“Es gente comprometida y encariñada con el sistema”, apuntó.
Una conquista de los trabajadores, explicó Tórrez, es que ahora participan en la toma de las decisiones importantes para la Cooperativa y la fábrica de cemento.
Tórrez destacó además que los trabajadores y profesionales que trabajan en Coboce gozan de estabilidad laboral, lo que permite a sus familias planificar su futuro a largo plazo.
APUNTES
• La fábrica de cemento inició sus operaciones el 15 de septiembre de 1972 con una planta construida por Italimpianti.
• Esta planta inicialmente tenía una capacidad de producción de 100.000 toneladas anuales de clinker.
• En 1993 y producto de una ampliación se aumentó la capacidad instalada a 300.000 toneladas anuales de clinker.
• Con la construcción de una segunda línea de producción, la fábrica de cemento de Coboce se convertirá en la más grande del país, con una producción de 75 mil bolsas por día.
• En la construcción de la segunda línea se está invirtiendo 71 millones de dólares.
• La fábrica de cemento de la Cooperativa se encuentra ubicada en Irpa Irpa, localidad ubicada a 64 kilómetros de Cochabamba.
• Coboce Cemento emplea en forma directa a 550 personas, 440 de las cuales trabajan en la planta de Irpa Irpa.