Gran parte de la población alteña amaneció ayer con la sorpresa de un nuevo precio del pan de batalla, impuesto de forma unilateral por los productores, lo que causó molestia, principalmente, entre amas de casa.
Cabe recordar que el fin de semana, en un ampliado del sector, la dirigencia determinó elevar el precio del pan de batalla a 50 centavos desde ayer.
PROTESTA
Muchas fueron las voces de protesta pública, señalando que es un golpe más a su magra economía, debido a que la mayoría de los alteños trabaja por cuenta propia, muchos de ellos con negocios particulares en el negocio informal.
“Esta es una decisión unilateral que sólo afecta a la población. Lastimosamente los panificadores no cumplen con el peso exacto del pan de batalla y ahora pretenden que paguemos más por su producto, no es justo para la ciudadanía”, afirmó Luis Pacheco, trabajador alteño.
Asimismo, María Copa, ama de casa, aseguró que “con este incremento y el intento de los choferes de subir los pasajes lo poco que ganamos no nos alcanzará para nada. Pedimos a las autoridades que impidan que estos incrementos se implementen”.
PANIFICADORES
De acuerdo con el dirigente de los panificadores, Mateo Churata, desde hace una semana atrás que su sector se declaró en estado de emergencia, exigiendo que las autoridades del Gobierno puedan dar alguna solución, sin que exista la posibilidad de este incremento. Sin embargo, hasta el día sábado, jornada en que se realizó un ampliado de los panificadores, no se tuvo respuesta, lo que generó que las bases decidieran la elevación del precio del pan de batalla a 50 centavos por unidad.
“Nosotros siempre hemos estado abiertos al diálogo, para lo que hemos esperado más de una semana. Lamentablemente, el Gobierno no se ha preocupado en darle una solución que posibilite mantener el precio a 40 centavos y no nos quedó más que cumplir lo decidido en el ampliado que efectuamos para tomar la decisión de elevar el precio del pan a 50 centavos la unidad, a partir de este lunes”, explicó Churata.
Asimismo, recordó que el precio por unidad de pan de batalla se incrementó en la urbe paceña hace varios meses, pese a lo cual los panificadores mantuvieron el precio de 40 centavos, a manera de beneficiar a la población alteña durante este último tiempo.
ATENTADO
Por su parte, el presidente del Concejo Municipal, Oscar Huanca, calificó el incremento como un atentado a la canasta familiar, pero aseguró que esperará que el Ministerio del ramo pueda tomar cartas en el asunto, debido a que los dirigentes del sector señalaron que esta decisión fue tomada a causa del incremento en el precio del quintal de la harina.
“Nosotros consideramos que este tema debería haber sido previsto por el Ministerio del ramo, además, no es novedad que se tomen estas decisiones, porque sabemos que los panificadores aducen que han aumentado el precio de la harina, porque los compromisos del Gobierno comprendían la dotación de maquinarias, lo que tampoco se han cumplido en un 50 por ciento”, aseveró Huanca.
Sin embargo, el presidente del Concejo advirtió que, de consolidarse este tema y de no existir ninguna acción por parte del Gobierno para solucionar a este problema, las autoridades municipales deberán implementar un control riguroso en el tema del control del peso y la calidad del producto, mediante la Intendencia Municipal.
“Sabemos que en estos dos temas, como es el peso y la calidad, los panificadores casi nunca han cumplido con los requisitos establecidos, lo que se conoce de sobre manera, por lo que la población, de manera constante, se ha ido quejando, por eso nosotros estamos dispuestos también a que el Municipio, mediante la Intendencia, ejerza un estricto control en estos dos temas, para lo cual deberán llegar hasta las mismas panaderías donde fabrican este producto”, finalizó el Presidente del Concejo Municipal.
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