La empresa metalúrgica Carlos Caballero SRL se encuentra en proceso de fabricación de 120 vagones para carga estándar, siendo la primer empresa nacional en producir este tipo de maquinaria. Asimismo, la fundición y producción de los bogies también se está realizando en el país.
Vagones con estándares de calidad. "Es preciso puntualizar que Carlos Caballero posee la experiencia, conocimiento y cuenta con la debida infraestructura y tecnología, junto con las respectivas certificaciones para diseñar y producir soluciones de transporte ferroviario especializado para GLP, combustibles varios o cualquier otro tipo de carga específica que requiera el mercado nacional e internacional cumpliendo con todos los estándares de calidad exigidos en cualquier parte del mundo", señalan desde la empresa a El Día.
En este marco, la empresa precisa que desde agosto del presente año, la Acería Guadix (fundición que forma parte del Grupo Caballero) comenzará a fundir y producir piezas específicas como bogies, reciclando los aceros de alta calidad que son excedentes de los procesos industriales de Carlos Caballero, dándole a la chatarra valor agregado dentro de Bolivia.
"Esto ubica a Carlos Caballero como la única industria capaz de producir boggies de altísima calidad y certificación", agrega la empresa.
En este sentido, desde Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) se informó que los vagones que se están fabricando son para la estatal petrolera, para el transporte de urea en la Planta de Bulo Bulo.
Se debe crear un mercado nacional de vagones. Por otro lado, Milko Antelo, gerente general de Bolivian Pacific Logistics, señala que las empresas agrícolas privadas como ADM, Bunge, Cargill, entre otras, tienen que movilizar en un corto periodo de siete meses alrededor de 875.000 toneladas por la Hidrovía Paraguay Paraná para llegar a Rosario o Nueva Palmira, cifra que se pretende llegar a 10 millones de toneladas con la Agenda 2025, por lo que sugiere que los privados accedan a vagones de fabricación nacional a través de créditos blandos del Banco de Desarrollo Productivo (BDP) para cubrir esa demanda de transporte.
"Se necesita del concurso de los privados para asegurar que la carga que venderán al resto del mundo esté asegurado su embarque a puerto marítimo o puerto fluvial. Si en Bolivia logramos fundir nuestros propios bogies, porque con la fundición podremos fabricar ejes y ruedas, eso hará que el obtener un vagón de trocha métrica para 25 toneladas brutas por eje a un costo de $us 70.000 sea menor que comprar 3 chatas (26 toneladas netas cada chata) y que lleven el mismo peso", explica Antelo a tiempo de agregar que se debe instalar una fundidora de bogies en el país para disminuir el subsidio de diésel invirtiendo en vagones.
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