El Gobierno aseguró una provisión de 1,7 millones de quintales de harina hasta diciembre en favor de los panificadores a precio subvencionado, además de la importación de trigo para procesar el producto.
“El pan sigue a 40 centavos de boliviano -precio establecido para 2013 en un convenio suscrito entre el Órgano Ejecutivo y el sector panificador- y hasta diciembre de este año no solamente vamos a entregar 1,7 millones de quintales, sino más 90.000 quintales extras”, informó la ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales, en una entrevista con la red de medios estatales.
La autoridad confirmó que Argentina por temas climáticos disminuyó su producción de trigo y de harina, y dejó de exportar estos productos para abastecer su mercado interno.
Sin embargo, para evitar el impacto de esa decisión en el país, se traerá del exterior 90.000 quintales de trigo para procesar harina, el precio de venta será de 270 bolivianos.
Se calcula que para este fin se requiere comprar al menos 4.500 toneladas de trigo.
Morales, además, señaló que el sector privado y el comercio también han decidido importar harina para abastecer el mercado nacional.
El secretario general de la Confederación de Gremiales de Bolivia, Ernesto Rada, indicó que el sector importó ya 10.000 quintales de harina desde Perú. El precio oscila entre 220 a 230 bolivianos, pero se comercializará a 260 bolivianos.
En junio, el Gobierno aprobó el Decreto Supremo 1608, que dispone la libre importación de trigo y harina, es decir sin pago de aranceles, durante 180 días.
Antes de la restricción impuesta por Argentina, las compras se hacían de ese mercado.
Beneficios
La ministra Morales confirmó que también está en pie la propuesta del Gobierno de garantizar con preferencia a los panificadores gas domiciliario y la entrega de amasadoras a crédito con condiciones favorables.
Sin embargo, señaló que al interior del sector no se ponen de acuerdo sobre esta oferta.
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