El discurso del Gobierno da un giro y en menos de 24 horas veta la exportación de carne bovina y da dos días a los actores de la cadena productiva para regularizar el precio del kilo gancho en Bs 19 en Santa Cruz y Bs 20,70 en La Paz. El lunes, en el acto de entrega del certificado de la OIE que acredita a Bolivia libre de aftosa con vacunación, el vicepresidente, Álvaro García Linera, comprometió ayuda (económico-técnica) al sector para aumentar la exportación.
“Para tranquilidad de carniceros, comerciantes y la población no vamos a autorizar ninguna exportación de carne, mientras no se regularice el precio del kilo gancho a Bs 19 en Santa Cruz y en La Paz, a Bs 20,70. Esa es la decisión tomada”, indicó la ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales, en La Paz. En estos distritos vale Bs 23,50 y 24.
La autoridad reconoció que en los últimos días, el precio de la carne subió debido a las constantes lluvias en Santa Cruz y en Beni, que derivó en el deterioro de los caminos e hizo incrementar el precio del transporte. “Esa circunstancia climatológica ya acabó y se espera que, hasta mañana, los precios se estabilicen”, puntualizó Morales
De la misma manera, la ministra dijo que espera lo propio con los precios del pollo, de la leche y de las verduras que se incrementaron en los últimos días, por la especulación de los comerciantes, a raíz de las lluvias.
Los ganaderos, en contra
Referente a la decisión estatal de suspender las exportaciones, desde la Federación de Ganaderos de Beni, el presidente Mario Hurtado la calificó de desatinada y fuera de contexto porque desincentivará la producción. “De qué nos sirve haber obtenido un estatus sanitario para exportar si otra vez nos coartan los mercados externos”, dijo Hurtado al afirmar que no son los productores los que fijan el precio.
Se buscó, sin éxito, conocer la posición de los líderes sectoriales de la CAO y Fegasacruz sobre el tema. No contestaron sus equipos móviles.
Alza de precios en mercados
En Santa Cruz, al menos 13 alimentos de la canasta familiar se encarecieron. Comerciantes atribuyen el alza a la llegada tardía de los alimentos del campo al mercado y a la helada.
La arroba de papa holandesa trepó de Bs 30 a 45; de harinosa, de Bs 40 a 50; e igual cantidad de cebolla, escaló de Bs 20 a 46. Las tres libras de haba escaló de Bs 5 a 7; de vainita, de Bs 5 a 8; de arveja, de Bs 8 y 9 a 12; de achojcha, de Bs 4 y 5 a 8; el kilo de tomate se duplicó de Bs 2 a 4; la planta de brócoli de Bs 5 y 6 a 8 y 10; y de coliflor, de Bs 8 a 15. El repollo subió de Bs 2 y 3 a 8 y 10; y el apio de Bs 5 a 7 y 10.
Desde el sector hortifruticultor creen que algunos comerciantes especulan con los precios para obtener mayores utilidades. No obstante, afirman que el deterioro de los caminos retrasa la logística y movimiento de carga a los mercados
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