En los más de 60 días de duración de la campaña Nombres, Embol vendió aproximadamente 7 millones de botellas de Coca-Cola de 500 ml personalizadas en todo el país.
“El objetivo principal de la campaña fue acercarnos más a nuestros consumidores nacionales, permitiéndoles tener una botella de su marca favorita, personalizada con su nombre”, expresó el gerente regional de Embol, Antonio Espinosa, que añadió que es la primera vez que Coca-Cola, en sus 127 años de existencia, permite efectuar este cambio en sus etiquetas.
Espinosa manifestó que para dar soporte a la campaña, se planificó inicialmente la producción de los empaques de Coca-Cola de 500 ml, remplazando el logo de la marca con 72 nombres usuales de bolivianos, escogidos con base en estudios y encuestas realizados a sus consumidores.
La campaña fue lanzada el 16 de agosto y tuvo una duración de dos meses, en los cuales se realizaron activaciones con la Fábrica de Nombres a escala nacional en distintos lugares como parques, plazas, universidades y ferias, donde los consumidores tuvieron la posibilidad de personalizar su botella para sí mismos, para sus padres, familiares, amigos, entre otros.
Espinosa señaló que en todos los lugares del país donde se llevó a cabo la campaña se logró una gran aceptación, viéndose esto reflejado en las largas filas de clientes que se formaban en las Fábricas de Nombres.
De los 72 nombres impresos, los 10 femeninos más frecuentes fueron: María, Ana, Isabel, Claudia, Gabriela, y masculinos: José, Miguel, Carlos, Fernando y Juan. Mientras que los 10 nombres de mujer más solicitados en la Fábrica de Nombres fueron Isabel, María Teresa, Luciana, Isabela, Valentina, y de varón Julio César, Mauricio, Adrián, Bruno y Mateo.
“Nuestra estrategia comercial en medios está enfocada a sostener e incentivar la demanda conectando a nuestros consumidores con los atributos de nuestros productos”, indicó Espinosa
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