lunes, 18 de marzo de 2013

ORPAN es considerada una de las mejores empresas de Latinoamérica en temas de derechos de patentes.

Cuando se habla de propiedad intelectual, ¿a qué tema específico se hace referencia?
La propiedad intelectual es un régimen legal dirigido a proteger ciertas creaciones del intelecto humano a favor de sus creadores, de forma de que ellos puedan ser propietarios de sus ideas y transar con ellas en el mercado, o sea vender la idea y beneficiarse.
Existe una gran gama de creaciones que pueden ser protegidas bajo este régimen, que tiene, obviamente, formas especificas para que se protejan las ideas, por ejemplo, las invenciones, ideas que solucionan problemas técnicos, se protegen por la vía de patentes.
Las marcas, que son nombres comerciales o lemas, se protegen por la vía del registro. Las obras literarias, musicales, y científicas se protegen por la vía de los derechos de autor.
Y existen normas especificas que regulan cada uno de estos subregímenes, pero son esencialmente normas que asisten a los creadores de ideas para que puedan protegerlas y prohibir a otros usarlas sin su autorización.

¿Cuál es el proceso para que una persona patente o proteja su creación?
El proceso de una patente de invención, por ejemplo está regulado por la Ley 486 y consiste básicamente en presentar una solicitud ante el Servicio Nacional de Propiedad Intelectual (Senapi), que se encarga de evaluar si la invención es patentable y emitir un documento que reconoce la protección de la idea por un periodo legal que es de 20 años.

¿También es posible patentar los medicamentos?
Sí, pero se puede dar varios enfoques al tema, por ejemplo las fórmulas farmacéuticas si son objeto de patente, siempre sean nuevas y tengan un nivel inventivo y sean aplicables realmente.
La fórmula, como tal, es una creación que se puede proteger mediante la vía de patente de invención. Pero también existen las marcas farmaceúticas, que se protegen, precisamente, por medio de la marca.
Pero hay un espectro muy amplio, se tiene muchas ideas que no están restringidas por su ámbito técnico que podrían ser protegidas de distinta manera por que no es lo mismo la marca del producto farmacéutico que la fórmula farmacéutica, son dos creaciones distintas que se protegen por vías distintas.

Una vez presentada la solicitud al Senapi, ¿qué procesos debe seguir?
En el caso de las invenciones, lo que hace el Senapi es corroborar que la persona sea la creadora. Obviamente existe dentro del procedimiento la posibilidad de que terceras personas puedan enterarse de que existe esta solicitud y presentar oposición a la concesión de la patente.
Pero el Senapi hace una verificación previa, para comprobar si esa invención, sobre la cual el inventor está pidiendo una protección, sea nueva. Esto se llama examen de patentabilidad y para eso se requiere personal técnico especializado en el ámbito de la invención.

¿Se sigue este proceso en todos los ámbitos de creación, como en los casos de los libros y las marcas?
Los procedimientos son distintos. En el caso de los libros, obras musicales y artísticas, que están protegidas por la propiedad intelectual, pero los derechos de autor, por norma, no exigen de que el creador registre su creación para que esta se considere protegida. Sí, existe un registro de obras autorales en el Senapi, pero es meramente declarativo, eso quiere decir que si alguien puede demostrar que la misma obra fue creada por otro autor, antes de la presentación de su solicitud, el registro no tiene ningún valor ante la demostración de la creación previa y el creador que se sienta agraviado puede seguir un proceso contra el que esté usando su obra sin una autorización.

¿Cuanto tiempo dura el proceso para tramitar la propiedad intelectual?
Hay muchos procesos y trámites que se deben realizar y cada uno tiene tiempos variables. En el tema de libros no es tan necesario tener el registro y es uno de los más rápidos, una semana. Las marcas, de 8 a 12 meses, y las invenciones, unos dos años.

"Una vez que transcurren 20 años, la patente pasa a dominio público, es decir que el propietario de la patente ya no puede prohibir que terceros hagan el uso del producto".

"Cuando se tiene el registro de la marca, se los puede renovar indefinidamente.
Depende mucho del tipo de creación, no todas las creaciones se protegen de la misma manera".

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