Los artesanos dejan la industria del cuero y se dedican a vender zapatillas importadas
El precio del cuero nacional se elevó en más del 30 por ciento provocando una migración de los artesanos dedicados a la industria de este producto a importadores de calzados fabricados en China.
“Es difícil ser zapatero diseñador en estos tiempos, porque el dinero no alcanza para comprar el material para hacer los calzados. Ahora, la mayoría sólo reparamos calzados o como otros optamos por cambiar de negocio”, comentó Ramiro Tantani, un artesano en cuero que tiene su tienda en la zona El Tejar de La Paz.
De acuerdo con los datos proporcionados por los comerciantes de la calle Sagárnaga, de la ciudad de La Paz, el costo del pie (medida equivalente a 30,48 centímetros) de cuero se elevó en 34 por ciento, esto quiere decir que, si un cuero como el Oscaria costaba 9,50 bolivianos en el 2007, ahora tiene un precio de 12,50 bolivianos.
Arminda Torrico, propietaria de una tienda de cueros ubicada en la calle Sagárnaga, atribuyó este incremento a la exportación del producto a otros países y a los cupos de entrega que establecieron los grandes intermediarios.
“Ya no deberían exportar solamente cuero, sino fomentar la producción de los zapateros y sacar el cuero con valor agregado en lugar de subir los precios y limitar el stock en las tiendas”, manifestó.
Años atrás, la gente adquiría un paquete de 15 cueros, equivalente a 2.500 bolivianos, en cambio ahora sólo llevan en unidades de 10 o 15 pies. Entre los cueros que ofertan cada una de las tiendas están el Charol, Charol liso, Oscaria, Mate, Boutex y suela entre otros.
Por el alza constante registrado en su precio, la demanda fue bajando “al punto de que los zapateros, clientes preferenciales de estas tiendas cambiaron de negocio dedicándose a la venta de zapatos chinos, que según ellos es más rentable por sus bajos costos”, reveló Torrico.
FALTA REGULADOR
Según Torrico, la falta de organización de los comerciantes frena la regulación de los precios, porque existen grandes empresas exportadoras de cuero que dominan los precios en el mercado interno y las tiendas pequeñas se sujetan al ritmo económico que imponen.
El incremento de los precios del cuero afectan indirectamente a los zapateros, plantilleros, operarios, distribuidores y otros de la cadena productiva que dependen de esta materia prima.
Según los vendedores, los proveedores subieron los precios porque mejoraron la calidad de los cueros para la exportación y también están atentos a satisfacer la demanda del mercado externo con productos semicurtidos.
Ante esta situación, se constató que algunos de los comerciantes determinaron cambiar de negocio por otro más rentable y que no exija mayor inversión. “Siempre exportaron la materia prima con cueros de primera calidad y lo que se queda en Bolivia es de segunda y tercera calidad, pero con precios elevados”, indicó Germán Tantani, ex vendedor de cuero.
TEMPORADAS
La venta de cueros para artesanos dedicados a la elaboración de zapatos, chamarras, carteras, billeteras, sombreros, maletines, tapices y otros está condicionada por las temporadas de producción como en las fiestas del gran poder y campeonatos mundialistas para la elaboración de pelotas.
En los centros comerciales de esta urbe hay productos de cuero que podrían catalogarse como ‘elititistas’, porque las chamarras y otras prendas de cuero tienen costos que van desde los 700 bolivianos hasta los 1.500 bolivianos.
El mercado paceño tiene tres principales proveedoras de cuero como la curtiembre cruceña: VIS Kuljis, la cochabambina Tomy y en La Paz la empresa Illimani.
Según los datos del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), las exportaciones de cueros de enero a mayo del 2011 llegaron a 20,4 millones de dólares.
Artesanos de Perú prefieren lo boliviano
Ante el incremento de precios en cueros, Germán Tantani decidió cambiar de rubro por la venta de suelas para zapatos y asegura que la mayor demanda que tiene es de clientes peruanos.
Actualmente, estos artesanos peruanos vienen a Bolivia para abastecerse de cueros, plantillas y otros insumos. Sus trabajos artesanales son exportarlos a otros países como al nuestro y tienen gran acogida por los diseños y sus precios accesibles.
“Cambié de rubro por algo más lucrativo y seguro, porque las ventas de cuero empezaron a bajar”, señaló el vendedor de suelas de la calle Sagárnaga.
Explicó que la forma del mercado de insumos para la zapatería dio un giro total, porque antes los artesanos bolivianos exportaban zapatos al Perú y en cambio ahora el negocio es a la inversa.
Asimismo, explicó que a comparación del 2010, sus clientes, los artesanos, que se registraban en su agenda superaban los 100 y a comparación de este año su lista se limita a 40.
En la feria 16 de Julio de la ciudad de El Alto, los calzados chinos, peruanos y chilenos llegan a precios mucho más bajos que de la industria nacional. Por ejemplo, una zapatilla deportiva está entre 40 y 50 bolivianos, en tanto que una nacional supera los 90 y 100 bolivianos.
Tantani sugirió a las autoridades del Gobierno fomentar el trabajo de los artesanos en cuero otorgando créditos a bajas tasas de interés que permitan un impulso verdadero del sector.
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