Industrias FINO avanza en la línea de detergentes

Pensar en Industrias FINO es pensar en los aceites de tradición cochabambina, las margarinas Reggia o las mantecas Karina y Gordito, todos productos comestibles. En 1998, la firma dio un salto hacia los productos de limpieza con sus jabones Oso; en 2007 afianzó el rubro con sus jabones UNO, con media docena de variedades, y desde hace un mes tiene en el mercado el jabón líquido UNO Pro, para el lavado de ropa a máquina o a mano, un producto que la compañía lo presenta como “revolucionario” y que termina de consolidar la línea de limpieza de la empresa.

La acogida en este primer mes "ha sido excelente ya que se trata de una innovación desarrollada bajo estándares internacionales, la cual se comporta muy bien en el lavado creando en el consumidor una experiencia positiva tanto en remoción de manchas, aroma y cuidado de la ropa", explica el gerente de Márketing de FINO, Franz Ruppercht Unzueta.

Según el Gerente, el producto es "revolucionario" porque "ha sido desarrollada bajo estándares internacionales comparándose con los mejores en el mundo, especializando además sus fórmulas a distintos tipos de prendas".

Por ello, el detergente se presenta en tres variedades: UNO Pro Blancos Extremos con White Pro Plus, que son polímeros que arrancan la suciedad sin dañar las prendas; UNO Pro Ropa Delicada con PH Neutro, ideal para ropa de bebé; y UNO Pro Protección Color con Color Pro Plus, con un polímero que previene la transferencia de color entre las prendas.

Para lograr estos nuevos productos, se han hecho inversiones, sobre todo en la planta de Cochabamba, que es donde se lo produce. "Hemos traído maquinaria de primer nivel, montando una línea exclusiva de producción y envasado completamente nueva. Adicionalmente estamos invirtiendo en el desarrollo de la categoría y nuestra marca en Bolivia", explica.

En cuanto a la materia prima, UNO Pro está compuesto por distintos compuestos activos y aditivos de última generación que buscan un lavado fácil y eficiente, sin dañar las manos y la ropa.

"Usamos fragancias de primer orden con micro cápsulas que son importadas de casas comerciales europeas. Los envases fueron diseñados en el exterior y son producimos en su totalidad en Bolivia", añade el Gerente de FINO.

Según Ruprecht, el uso del detergente líquido es una tendencia creciente en el mundo y países vecinos. "Por ejemplo hoy en Argentina una de cada dos amas de casa ya lava con detergente líquido y nosotros a través de UNO Pro traemos esta tendencia a Bolivia".

Para el lavado a máquina la medida es de dos tapas por cada seis kilos de ropa, mientras que para el lavado a mano, se utiliza una sola tapa, en cinco litros de agua.

La empresa por ahora está enfocada en el desarrollo del mercado local. Posteriormente, evaluará oportunidades de desarrollo internacional, ya que "es un producto diseñado para competir en cualquier mercado en el mundo".

LIMPIEZA

De jabón UNO a detergente UNO Pro en 7 años

Aunque ya tenía el jabón Oso, FINO dio un gran salto hace siete años con su producto de jabón UNO.

"Gracias a la respuesta positiva del mercado boliviano UNO se ha convertido en la marca líder de jabones de lavar, con una imagen de marca muy fuerte y reconocida, lo que nos ha llevado al reto de complementar la tarea de lavado del ama de casa", explica el gerente de Márketing de FINO en referencia al detergente UNO Pro.

Además del detergente, que ya se encuentra en todos los supermercados y mercados, FINO presenta también una línea de suavizantes de ropa UNO Caricias, que vienen en cuatro fragancias.

Tanto el detergente líquido como los suavizantes de ropa son producidos en Bolivia con calidad internacional, y están disponibles en envases de 900 y 1800 mililitros, según explica el Gerente.



HISTORIA

71 años de trayectoria agroindustrial

Industrias de Aceite Fino se fundó el 15 de febrero de 1944 en Cochabamba.

En 1974, la planta de extracción de aceite por prensado se traslada a Warnes (Santa Cruz) con el fin de acercar la actividad productiva al origen de la materia prima.

En 1982, se amplía la planta en Cochabamba y se instala la unidad de extracción por solventes Crown en Santa Cruz con capacidad de molienda de 400 toneladas día.

Ese mismo año se lanza al mercado Manteca Karina.

En 1986, la empresa introduce Margarina Regia.

En 1995, pensando en el sector panadero, se desarrolla Manteca Gordito.

En 1996, se instala una nueva planta de extracción Tecnal con capacidad para producir 800 toneladas día.

En 2006 amplía la capacidad de molienda produciendo 1.500 toneladas día.

En 1999, se inicia la exportación de aceites envasados a países miembros de la CAN.

En 1998 presentan el jabón de ropa OSO, y en 2007 se lanzan los jabones UNO.

En 2010, se inaugura la segunda fase de un “megasilo” en la localidad de Pailón.