El crecimiento de las inversiones en Cochabamba va al mismo ritmo del incremento de su población. La apuesta económica para abrir un nuevo negocio ocupa el tercer lugar en el país, al igual que el número de sus habitantes.
Así lo demuestra el registro realizado por Fundempresa a julio de 2013.
Dicha investigación señala que el primer semestre de este año, 6.591 empresas se abrieron en Cochabamba, mientras que Santa Cruz con 10.618 empresas ocupa el primer lugar y La Paz el segundo puesto con 8.468 empresas registradas.
En comparación a la gestión 2008, la situación no ha cambiado nada, pues en esa época la Llajta también ocupaba el tercer lugar en inversiones, luego de Santa Cruz y La Paz.
El crecimiento económico va de la mano con el crecimiento de su población, pues Cochabamba también se sitúa como el tercer departamento más poblado del país con 1.758.143 habitantes, de acuerdo con los últimos datos oficiales del Censo de Población y Vivienda 2012.
Pero el tercer lugar que ocupa este departamento, tanto en empresas como en población, no es suficiente para que Cochabamba figure como una de las ciudades más atractivas para la inversión.
Pues, según un artículo de la Fundación Milenio, Cochabamba no figura en el Ranking de las Mejores Ciudades para Hacer Negocios de América Latina 2012. En dicho estudio solamente aparecen La Paz en el puesto 38 y Santa Cruz en el 45.
CIFRAS
El presidente de la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEEPC), Jaime Ponce, señaló que la inversión en el departamento es observada desde dos perspectivas: la primera tiene que ver con la tendencia de los datos del Registro de Comercio; y la segunda por el tipo de crédito al que accede el sector empresarial.
La base empresarial activa de Bolivia, según los datos de Fundempresa, a julio de 2013, es de 104.533 empresas, de las cuales 19.248 pertenecen a Cochabamba, lo que equivale al 18 por ciento del país.
En cuanto a las actividades económicas de esta base empresarial, el comercio al por mayor y menor, construcción y la industria manufacturera se constituyen en las tres más relevantes, con participaciones de 39, 12 y 10 por ciento respectivamente, indicó Ponce.
Según la cartera del Sistema Financiero, los datos de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) a junio de 2013 indican que la participación del crédito a empresas asciende al 69 por ciento del total, con un crecimiento del 10 por ciento respecto a los datos a diciembre de 2012.
Del total de créditos a empresas, el 41 por ciento corresponde a microcréditos, el 34 por ciento a créditos pyme y el 25 por ciento a créditos empresariales.
Los sectores que se destacan en la composición del total de crédito son: el productivo y de comercio con participaciones del 41 por ciento y el 35 por ciento respectivamente.
Como departamento, Cochabamba tiene una participación del 18 por ciento de la cartera de crédito nacional y en el caso de crédito productivo asciende al 17 por ciento .
LAS VENTAJAS
Y DESVENTAJAS
Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio y Servicios de Cochabamba, Aldo Vacaflores, manifestó que el departamento continúa siendo atractivo para los empresarios por muchos aspectos, sin embargo también mencionó las desventajas frente a otras regiones.
Entre las potencialidades señaló que Cochabamba es atractiva por su posición geográfica, ya que el departamento se vincula con varias regiones del país, aunque todavía hace falta consolidar muchas vías y caminos para sacar los productos.
El agradable clima de la Llajta es otra de las ventajas que los empresarios ven al momento de invertir en el departamento.
El capital humano, es decir, la gente trabajadora que existe en el departamento es otro de los parámetros que los empresarios toman en cuenta al momento de realizar sus inversiones.
Vacaflores indicó que hay algunas señales que no permiten que las inversiones se expandan en el departamento. Entre ellas mencionó la amenaza y la toma de tierras de algunos empresarios.
Por su parte, Ponce manifestó que todavía hace falta trabajar en muchos aspectos para motivar al empresariado a seguir invirtiendo en la región. Algunos de estos aspectos son: la falta de confianza por la inseguridad jurídica y la carencia de políticas económicas claras, la falta de una política efectiva de apertura de mercados para las exportaciones y la restricción a las exportaciones.
Para impulsar la inversión en el departamento los empresarios proponen que se trabaje en una Ley de Inversiones que promueva la iniciativa privada. Esta norma debe, según el sector, convertirse en la herramienta para impulsar el crecimiento del departamento.
También se debe complementar la reglamentación de la Ley Nº 3420, para los emprendimientos comprendidos en el Parque Industrial Santiváñez y el Aeropuerto Jorge Wilstermann.
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