Si bien admite las ventajas del crecimiento sostenido de la economía durante la última década, la Cámara Nacional de Industrias advierte que desde 2015 se vive una etapa de desaceleración y contracción. Al respecto, identifica factores que vienen incidiendo en lo que denomina un congelamiento de la economía.
‘Contracción’ y ‘desaceleración’ son las dos palabras que la Cámara Nacional de Industrias (CNI) denunció como problemas centrales de la economía boliviana, a manera de advertencia para no tener que afrontar una crisis mayor en el futuro.
Frente al crecimiento de la economía registrado durante la última década, la CNI pone una preocupante desaceleración que, según dijo, se siente desde 2015.
Y señala como dato a tomar en cuenta que las más afectadas son la pequeña y la microempresa, el sector que generaría el mayor empleo formal en el país.
Cifras en rojo
Según la CNI, esta situación no es producto de una fantasía; por el contrario, se asienta en una realidad de cifras en rojo que no es del todo nueva.
El primer punto del análisis de esta institución, presentado la semana pasada en un conversatorio, en La Paz, está referido al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), que tuvo una tasa decreciente en los últimos tres años.
Según el asesor de Presidencia y Gerencia de la CNI, Hugo Siles, el origen de la caída en los precios de las materias primas (“commodities”) redujo los ingresos de las fuentes externas y generó un déficit fiscal y déficit comercial.
Así, la contracción se relaciona directamente con una franca declinación de la economía nacional. Y el sector industrial se concentró, sobre todo, en cuatro indicadores.
Cuatro indicadores
Con base en datos oficiales, la CNE observó al menos cuatro indicadores económicos, de acuerdo con una información publicada por El Deber.
Esos indicadores son: Déficit comercial, pérdida de competitividad para las exportaciones y los productos nacionales, déficit de la balanza fiscal, e impacto sobre las mype (micro y pequeñas empresas).
“Hay una desaceleración profunda en la manufactura”, declaró, al respecto, el presidente de la Confederación Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (Conamype), Humberto Baldiviezo. “Si no sacamos políticas que permitan el desarrollo de la protección, posicionamiento de la manufactura, le aseguro que para el 2025 puede ser un peligro para la economía y el empleo”.
Con relación al primer indicador, la CNI dice que después de superávit comercial entre 2004 y 2014, en 2015 se sufre un déficit comercial de $us 855 millones; en 2016, $us 1.287 millones y a mayo de este año $us 645 millones, con la tendencia de cerrar también con déficit.
El déficit comercial, además, afecta a la caída de las Reservas Internacionales Netas (RIN).
En cuanto a la estabilidad del tipo de cambio, los industriales señalan que debido a la devaluación de las monedas en los países vecinos, Bolivia perdió competitividad para sus exportaciones y los productos que fabrica.
Finalmente, marcan como un signo de desaceleración y de contracción de la economía al déficit de la balanza fiscal desde 2014, que se presenta cuando los gastos del sector público son mayores a los ingresos. El déficit para este año, según el Presupuesto General del Estado, alcanzaría a 6.5% este año.
La recomendación
El presidente de la CNI, Horacio Villegas, luego de aclarar que la desaceleración no significa decrecimiento, sino que la economía sigue creciendo pero a un ritmo más lento, enfatizó en la necesidad de generar mejores condiciones para la inversión privada y la formalidad en el país.
Entre los reclamos se cuenta el de la presión fiscal, tributaria y normativa sobre las empresas formales por parte del Servicio de Impuestos Nacionales, la Aduana Nacional, la Autoridad de Empresas y otras entidades del Estado.
El sector industrial está convencido de que se debe apostar, especialmente, por las mype. “Ellos son los que sienten directamente y de forma más fuerte los incrementos salariales, los pagos retroactivos, la disminución de las ventas y el contrabando”, dice su titular.
En definitiva, sentencia después, “las grandes empresas tienen más facilidad para acomodarse y para encontrar algún instrumento que encuentre cada vez mejor eficiencia”.
CLAVES
Finanzas
Depósitos y créditos
Otro de los signos de la contracción que experimenta la economía es el descenso en la liquidez en el sistema financiero, advierte la CNI, tanto en bancos múltiples, Pymes y entidades financieras de vivienda.
Inflación
negativa
La inflación acumulada en los primeros seis meses llegó, según el INE, a solo 0.14%. En relación a una inflación moderada en 2010 de 7.1% y en 2016 de 4% es negativa, según la CNI, pues muestra un congelamiento de la economía.
Empleo
y productividad
A pesar de la caída del desempleo a 2.3% el año pasado, para la CNI la preocupación mayor es la generación de empleo productivo y formal, con seguridad social a mediano y largo plazo y aportes para la jubilación.
Salario
Incremento 2017
Según la CNI, los incrementos salariales tuvieron efecto directo en los costos de producción con pérdida de productividad y reducción en la competitividad, frente a los productos de contrabando y los importados.
Gobierno
No hay riesgo
Según el ministro de Trabajo, Héctor Hinojosa, no hay riesgo de quiebra porque las empresas pueden justificar su imposibilidad de aumentar salarios presentando un balance de estados.