El Producto Interno Bruto (PIB) de Bolivia creció en 4,21% el año pasado, debido al favorable desempeño de los sectores no extractivos, los cuales representan el 80% de la producción nacional, revela el informe del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.
Con base en el documento de la cartera de Estado, el sector agropecuario creció en 7,8%; industria alimentos y bebidas, en 5,8%; construcción, en 5,6%; transporte y comunicación, en 5,4%; comercio, en 5,2%; la administración pública, en 5%, entre los principales rubros que aportaron al PIB.
En tanto, dos sectores registraron un mínimo crecimiento, como el resto de la industria, con 0,7%; minería, con 0,5%; y el rubro de hidrocarburos registró una cifra roja con -3,1%.
En pasadas declaraciones, el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Mario Guillén, señaló que el crecimiento económico del país ya no depende de la industria extractiva, en comparación con anteriores gobiernos, en los que el crecimiento estaba directamente relacionado con el precio internacional del petróleo y los minerales.
En ese contexto, considerando la composición de la de la producción boliviana, la industria manufacturera representó en 2017 el 18,6% del PIB, seguida por el sector de establecimientos financieros, con el 14,3%; agropecuario, con el 13,8%, y el rubro de transporte y comunicaciones, con 12,8%.
Todos estos sectores están vinculados a la demanda interna y son generadores de empleo, los cuales en conjunto presentaron un crecimiento positivo en 2017, señala el informe del Ministerio de Economía.
El PIB de Bolivia creció en 3,3% al primer trimestre de 2017, para el segundo período subió en 3,6%, hasta septiembre creció en 3,8%, y hasta el cuarto trimestre se incrementó en 4,21%, con lo que alcanzó un incremento sostenido, según el informe del Ministerio de Economía.
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