Colanzi sostuvo que jamás imaginaron llegar a la situación actual. “Venimos cayendo desde 2011. Nuestras ventas, tanto al mercado interno como al externo, han caído en un 50% en los últimos cinco años”, explicó.
Según Colanzi, uno de los fenómenos más negativos para la industria forestal boliviana han sido las importaciones de productos de madera, agravado por las devaluaciones de las monedas de Brasil, China, Argentina y Chile.
En 2010, Bolivia importó productos de madera en alrededor de $us 17 millones.
Colanzi precisó que las causas ya son conocidas en especial por las autoridades, pero hasta ahora no se logra revertir la crisis y todo apunta a que esta continuará
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