Desde el año 2008, treinta obreros trabajan en la fabricación de estas piezas. Con los diseños y planos de la empresa alemana Polysius, expertas manos bolivianas dan forma a grandes ideas que transformarán el concepto de la industria del cemento en Bolivia.
El trabajo iniciado tiene características titánicas, por las dificultades que existen en Bolivia para acceder a la materia prima y los equipos especializados. “En Bolivia hay pocos talleres o fabricas para realizar los trabajos para este evento”, explica el gerente de Coboce Metal, Orlando Zegarra.
El material es importado principalmente de países como China, Perú, Chile, Argentina y Ucrania. “En Bolivia tenemos el yacimiento más grande de metal en el mundo, pero no tenemos una planta siderúrgica para procesar el mineral de hierro y convertirla en diversos productos para el consumo nacional”, dice Zegarra.
Cuando el material llega a Bolivia, éste pasa por un estricto control de calidad, a través de equipos especializados que tiene Coboce Metal.
El apoyo en la instalación de la segunda línea de cemento es el segundo reto más importante emprendido por sus trabajadores. Ya en el año 1990, la primera ampliación de la cementera requirió la dedicación de alrededor de 25 trabajadores.
En aquel entonces, la empresa adquirió tres equipos básicos -guillotina, plegadora y cilindradora-, básicas, hoy su instalación cuenta con equipos de soldadura continua, plasma, cilindradoras de menores diámetros y el trabajo arduo y dedicado de técnicos y obreros especializados en el área.
Con el aporte de esta empresa cobociana a la primera ampliación de la cementera, la producción fue triplicada, de trescientas a mil toneladas de clinker al día. Con la instalación de la segunda fábrica, la producción se ampliará en 1.500 toneladas más al día; es decir, la cementera producirá 2.500 toneladas de clinker. Producción que alcanzará a cubrir la demanda local y nacional.
“Con la primera ampliación se llegaba a los mercados de Santa Cruz, Tarija y La Paz, ahora, aún con el boom de la construcción, Coboce llegará a cubrir la demanda de todo el país”, señala Zegarra.
Conductos, empalmes, transiciones, bajadas y un sinfín de piezas son fabricadas en Coboce Metal. La magnitud y precisión de este trabajo se refleja en pequeñas piezas que pueden pesar dos kilos, así como en las grandes obras de ingeniería que llegan a pesar más 4 mil kilos, en láminas de hasta 3/4 de espesor.
Otro equipo de fabricación se encuentra en la misma planta en Irpa Irpa, elaborando las piezas de mayor tamaño. “Por el gran peso, tamaño y volumen de las piezas la mayor dificultad es el transporte”, explica el gerente.
Para el traslado de piezas construidas en las instalaciones de Coboce Metal, la empresa de cemento realizó la compra de 2 lowboys, que son vehículos con una plataforma más baja que permite el transporte de grandes volúmenes y peso, con una longitud de 12 metros y una capacidad de carga de hasta 30 toneladas.
Personal.
Expertos técnicos e instituciones apoyan la capacitación de obreros
La capacitación permanente del personal técnico es la principal apuesta de Coboce Metal para la excelencia de su servicio. Expertos nacionales e internacionales apoyan esta importante tarea.
Para la instalación de la segunda línea de Coboce Cemento, la empresa contrató a expertos en soldadura, desde Perú y Argentina.
Instituciones como el Centro de Apoyo a la Pequeña y Micro Empresa Industrial y de Servicios de Cochabamba (Apimec), la empresa de Servicios de Desarrollo Empresarial (Sedesem), y la Fundación Nacional para la Formación y Capacitación Laboral (Infocal) coadyuvan con la empresa para la capacitación permanente de sus técnicos en las áreas de mecánica, mantenimiento, electricidad y soldadura.
La contratación de profesionales y técnicos bolivianos caracteriza a esta empresa cobociana con principios cooperativos, que creen en el potencial intelectual y laboral de sus trabajadores. “Antes no había personal especializado en estas áreas, y contratamos profesionales egresados del Tecnológico Industrial Boliviano Canadiense -El Paso y los especializamos”, resalta el gerente de Coboce Metal, Orlando Zegarra.
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