Además de funcionarios del Sedes, la procesadora fue allanada por efectivos de la Guardia Municipal de La Paz, de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) y del Ministerio Público.
Allí se encontraron, al menos, 2.000 botellas de alcohol adulterado. “Hemos encontrado una cantidad bastante grande de alcohol Guabirá y Caimán, el cual es alcohol metílico que no es apto para el consumo humano, también encontramos tres equipos grandes para hacer las mezclas. Existen otros productos como colorantes y saborizantes para vodka y ron que no tienen el registro sanitario correspondiente”, informó a La Razón Meylin Vega, responsable del Centro de Vigilancia y Control Sanitario del Sedes.
Trabajo. Se decomisaron además una 100 cajas de alcohol, cada una de las cuales tenía una docena de frascos y bidones grandes llenos de trago. Después de la intervención, la fiscal Frida Choque determinó la aprehensión de seis mujeres que estaban en la instalación clandestina, donde lavaban botellas en condiciones “totalmente” antihigiénicas para posiblemente realizar las mezclas de las bebidas.
También se hallaron tapas con las que hacían el resellado, lo que evidencia que reciclaban las botellas, les quitaban las marcas y colaban las tapacoronas con un pegamento que no era el adecuado. La empresa de bebidas Terranova vende los conocidos rones de sabores y vodkas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario