Álvaro García Linera - En entrevista con La Razón, el Vicepresidente aseguró que 2011 tiene muy buenos resultados en las variables macroeconómicas, con reducción en la extrema y moderada pobreza en el país. En 2012, el Gobierno se esforzará en mejorar los volúmenes de exportación y la ampliación del mercado interno. Además, el Órgano Ejecutivo se puso como reto la fase de la industrialización de las materias primas, en los sectores de litio, minería, energía e hidrocarburos.
— Señor Vicepresidente, ¿cómo evalúa el comportamiento de la economía boliviana este año?
— Bueno, éste es un año con muy buenos resultados para el país, un crecimiento elevado siempre puede ser mejor, pero es un crecimiento elevado 5,4% de crecimiento, es decir, de expansión de la economía. Un crecimiento notable de la exportación de gas, de minerales, de manufacturas en volúmenes y en dinero. A noviembre, tenemos $us 7.500 millones de exportación. Recibimos un país que exportaba $us 2.600 millones. Ahora exportamos 7.500 a 8.000, capaz a fines de diciembre ya son los $us 8.000 millones de exportaciones de gas, minería y manufactura.
Es decir, hemos diversificado nuestra base productiva y exportadora, hemos controlado la inflación, tenemos un sistema financiero muy sólido y muy estable, $us 12.000 millones de reservas internacionales, $us 10.000 millones en los bancos, una acelerada reducción de la pobreza y de la extrema pobreza, un dinamismo económico que se lo siente en las ciudades y en el campo, como no se había visto antes. Entonces, tenemos un manejo responsable de la economía y un modelo económico productivo exitoso.
Ahora, faltan muchísimas cosas por hacer, por supuesto nadie está contento ni vamos a sentarnos para detenernos ahí, se puede hacer mucho más. La siguiente fase será la industrialización que es costosa en dinero y es lenta en los tiempos, pero se va a hacer sobre este modelo económico nacional productivo exitoso, expansivo y redistributivo que tiene al Estado.
La mitad del crecimiento de nuestra economía es mercado interno, la mitad, un poquito más de la mitad son exportaciones, mercado externo. Entonces, es una economía que camina con dos pies, mercado interno y externo. Siempre hay riesgos de una contracción en el mercado externo. Entonces, no podemos apostar todas las esperanzas y las energías en ese pie que puede tener problemas por la crisis mundial, también hay mercado interno (...), pero el reto de 2012- 2015 son las primeras fases de la industrialización de las materias primas: litio, potasio, gas, agua y minerales.
— ¿Cuál es la perspectiva económica que se tiene para 2012?
—Confiamos en mejorar el crecimiento económico. Nos esforzaremos en mejorar los volúmenes de exportación y por ampliar el mercado interno en nuestro país, en términos de consumo y de diversificación económica, pero le repito, el gran reto que ya se ha puesto en marcha (...) es la fase de la industrialización de las materias 2012-2015. Es el momento de la industrialización de las materias primas de nuestro país. Esperamos ver ya resultados del litio, en ámbitos todavía pequeños de litio, nuestro horno de fundición Aumelt. Ojalá la planta separadora de líquidos y ya los pasos iniciales de urea y amoniaco, otra planta separadora de líquidos, nuevas hidroeléctricas y expansión de la producción de alimentos.
—¿Cómo abordará el Gobierno las negociaciones comerciales con EEUU y Europa?
— De amplia apertura, pero está claro que Bolivia ya no depende de un solo mercado. Ha diversificado sus mercados, estamos muy contentos de ello. De tal manera que si hay crisis económica en un país, tenemos otros países que compran nuestras materias y nuestros productos; diversificación de mercados es la mejor estrategia que hemos tomado para proteger nuestra propia economía. Estados Unidos es el mercado más grande del mundo, lo necesitamos, exportamos hoy, exportamos textiles, exportamos joyas, exportamos minerales y queremos seguir exportando mucho más, pero siempre que sea una relación de mutuo respeto y no condicionada políticamente.
— ¿Esa sería la base?
— La base es que no tiene que haber condicionamiento político de ningún tipo, pero necesitamos del mercado norteamericano y nos vamos a esforzar para ampliar nuestra presencia económica, productiva y comercial en Estados Unidos, y en Europa, por supuesto cómo vamos a dejar de lado mercados fundamentales de la economía mundial. No se los puede dejar, pero ya no dependemos de ellos y al no depender de ellos ya no aceptamos chantajes políticos, especialmente de Estados Unidos.
—En las negociaciones con EEUU, ¿en qué puntos se pondrá énfasis. Cuál es la estrategia boliviana para abrir el comercio con el norte?
— No, el mercado está abierto, no está cerrado, de hecho ahora exportamos más que antes a Estados Unidos. No tengo el dato aquí exacto, los datos que estaba manejando el viceministro (Huáscar) Ajata, hace un mes atrás, mostraron de que las exportaciones hoy a Estados Unidos bajo el régimen del SGP (Sistema de Preferencias Generales) creo que son mayores que el año 2005, 2006, 2000, 2007, 2008. Hemos mejorado, hemos crecido notablemente, mientras otros países han decrecido teniendo incluso firmado tratados de libre comercio. Nuestro interés es que esas exportaciones se incrementen, queremos más presencia en el mercado más importante del mundo que es el norteamericano, pero lo vamos a hacer, lo estamos haciendo y lo haremos sin ningún tipo de condicionamiento político.
— ¿En estas rondas de negociaciones se pedirá la liberalización de aranceles?
— En ciertos productos, pues hay acuerdos mundiales que te exigen que reduzcas tendencialmente a cero a cierto tipo de aranceles y otros productos. Las economías protegen también su propia producción. Estados Unidos es un país proteccionista, nos hizo creer durante 20 ó 30 años de que el mundo vivía de la libre importación y libre mercado, falso. El mercado siempre está regulado por alguien, directa o indirectamente y nuestro país eso lo ha entendido, no ha caído en la trampa del libre mercado (...). Pero en acuerdos internacionales siempre vamos a pelear en la búsqueda de reducir las asimetrías económicas para que se permita y se dé mayores beneficios a las exportaciones de los países en desarrollo.
— ¿Esto significa liberar de aranceles para las exportaciones de productos bolivianos?
— Nos conviene en cierto tipo de productos, especialmente textiles, nos conviene eso.
— ¿Eso es lo que se plantearía en las rondas?
— Lo estamos haciendo, no es que lo vamos hacer, venimos peleando desde que hemos entrado al Gobierno y yo me acuerdo haber viajado a Estados Unidos cinco veces para ir a reclamar ese derecho. A pedir ese derecho, pero sin aceptar ningún tipo de condicionamiento político. Cuántos nos decían, muy bien te voy a liberar de aranceles a estos tres productos, pero el ministro de Gobierno lo nombro yo, el comandante de la Policía lo nombro yo, el director de la FELCN lo nombro yo, y yo decido qué tienes que hacer con las inversiones públicas y dónde. Eso era lo que pasaba antes. Ahora decimos, señores el ministro lo nombra el Presidente, el comandante lo nombra el Presidente, pero es su responsabilidad y obligación que en éste y en este producto me reduzca aranceles, ahora así son las relaciones. Así son los encuentros y los diálogos con las delegaciones norteamericanas en base al respeto mutuo, el mutuo beneficio y la dignidad.
— En el planteamiento que llevará Bolivia para el inicio de esta ronda de negociaciones, que se va a iniciar a partir del próximo año con EEUU, ¿propondrá una liberalización de aranceles similar al ATPDEA?
— Vuelvo a decirle, venimos haciendo eso desde hace tiempo. Apertura de mercados, reducción de aranceles, prefiero hablar de reducción de aranceles, la palabra liberalización no me gusta. Reducción de aranceles a productos de exportación de los bolivianos en el marco de la reducción de asimetrías económicas de los países.
— ¿Reducción es igual a liberalización cero arancel?
— Puede llegar a ser eso, pues, pero a veces no. Ahora te cobran digamos el 20% por importar textiles con tela de origen regional o importado, entonces vamos a pelear a que se reduzca a cero, pero si no se puede a cero por lo menos a 3 o a 5 ó 10%.
— ¿Cómo evalúa el Gobierno la lucha contra el contrabando, toda vez que se promulgaron varias normativas para impedir la salida de alimentos y combustibles al exterior, pero hasta el momento no hay personas que hayan sido procesadas por este delito?
— No, hay bastante gente detenida y más que detenida hay una gran cantidad de automóviles incautados, de camiones con línea blanca. La Aduana está ahí repleta de ese tipo de cosas, pero es una lucha yo diría casi perpetua, ininterrumpida porque las condiciones de vida de Bolivia son diferentes a las condiciones de otros países. Entonces, eso qué provoca, que a veces precios o productos que son más baratos aquí en Bolivia, la gente prefiere contrabandearlos hacia el exterior. Ése es el caso del contrabando de productos bolivianos alimenticios al exterior.
Ahora, en cuanto a importaciones, en el caso de los automóviles o en el caso de línea blanca, por ejemplo, el comerciante prefiere no pagar impuestos para meter la mercancía. Entonces, mete 100 computadoras, si tuviera que pagar los impuestos de ley por esas 100 computadoras tendría que depositar al Estado $us 1.000 por 100 computadoras o $us 2.000 y prefiere meter de contrabando, pagando a un camionero que se arriesgue, sobornar a algún funcionario intermedio y gastar $us 500 y ahorrarse $us 500. Eso es lo que hacen algunos contrabandistas.
Por lo tanto, es nuestra tarea, cómo a través de un mecanismo económico desincentivamos el contrabando, eso es acelerando los procedimientos. Es nuestra obligación como Gobierno, quieres meter tu mercancía, que sepas que si lo haces vía contrabando corres el riesgo de perder todo y vas a tardar una semana y si lo haces por la vía legal vas a tardar la misma semana que por vía contrabando y vas a pagar menos, y no corres riesgo. Es decir, nosotros tenemos que acortar los tiempos de desaduanización de trámites: Ésa va a ser una gran medida que va a ayudarnos muchísimo.
— ¿Qué otro tipo de medidas implementará el Gobierno para evitar que continúe el contrabando de alimentos y carburantes? El martes, La Razón difundió un amplio reportaje sobre el contrabando hacía Perú, donde se evidencia que siguen saliendo alimentos y carburantes por la frontera binacional.
— No, pues, tú has dado la respuesta. Si aquí la gasolina vale Bs 3,60, al frente vale Bs 10, siempre va a haber contrabando. Lo que tienes que hacer (es) más patrulla, perseguir, controlar, pero va a seguir habiendo contrabando. Ése es un problema endémico especialmente en carburantes. El problema es que aquí (en Bolivia) es más barato y allí es más caro.
— ¿Pero, continuará el contrabando?
— Ley económica compañero. Si caminando medio kilómetro ganas 10 pesos y con un bidón que lo llevas en tu espalda ganas 100 pesos, lo vas hacer de una u otra manera. Vamos a intentar castigarte y bloquearte por todos lados y en vez de que saques 10 bidones, vas a sacar nomás medio bidón, pero siempre sacarás un poquito. Es muy difícil.
Perfil
Nombre: Álvaro García Linera
Nació: 19-10-1962
Profesión: Matemático
Una vida entregada a la tarea intelectual y política
Cursó la carrera de Matemáticas en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y fue docente en varias casas de estudio en el país. Es autodidacta en Ciencias Sociales y Ciencias Políticas. En 1985 regresó al país, formó parte de la dirección ideológica del EGTK (Ejército Guerrillero Túpac Katari). En 1992 fue retenido en el penal de Chonchocoro. En 1997 fue puesto en libertad y después de 13 años y seis meses de iniciado el proceso judicial, éste prescribió. Además de la actividad política, incursionó en los medios de comunicación como analista político social. Escribió varios libros y artículos.