domingo, 10 de julio de 2011

Yacuiba busca ser un gran polo industrial

El presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Yacuiba, Celso Ordoñez, informó que promueven una zona comercial industrial en Yacuiba y que en base a incentivos fiscales y aduaneros se busca que se asienten varias empresas.

“Hemos propuesto hacer un parque industrial en 150 hectáreas, hacer una apropiación de otro terreno (25 ha) por parte del municipio para que sea uno de los parques más grandes del país. Tenemos 15 asociados que quieren asentarse en la zona. Hay una termoeléctrica que pretende invertir 20 millones de dólares, además hay una maderera, una de cerámica, etc”, dijo el directivo.

Empero, los empresarios piden al Gobierno la provisión de gas y energía eléctrica, y al municipio servicios básicos. “Estamos trabajando tres años y el próximo mes queremos concretar el proyecto”, aseveró.

El presidente de la Zona Comercial e Industrial del Chaco (Zocoinch), Víctor Retamozo, dijo que se establecen condiciones adecuadas desde donde se implementará y se construirá la nueva macrorregión productiva e industrial.

Para ello se prevé incorporar a grandes, medianas, pequeñas y microempresas tanto nacionales como extranjeras, para promover actividades de desarrollo científico y tecnológico.

OPINIÓN

“A desgasificar la balanza comercial”

Gary Rodríguez, Gerente del IBCE

Pese a la enorme expectativa que suscitó la puesta en vigencia del Acuerdo Bolivia-Mercosur (Mercado Común del Sur), el 28 de febrero de 1997, las cosas no salieron bien para Bolivia.


El Gobierno neoliberal de aquel entonces, obstinado como era, suscribió el convenio con dicho bloque “contra viento y marea”, creyendo que las ventas bolivianas al Mercado Común del Sur, se incrementarían, ya que las trabas no arancelarias para nuestros productos con valor agregado debían suspenderse.


Lamentablemente no ocurrió así como se esperaba.


Sin embargo, tampoco en los “tiempos plurinacionales” en que vivimos, la cosa ha sido mejor.


Si bien Argentina y Brasil actuaron políticamente ofreciéndose como mercados alternativos para los productos nacionales que perdieron el Atpdea el 2008, incumplieron su promesa.


Quien sí cumplió sus compromisos fue Bolivia, sin poner dificultades al ingreso de los productos a su mercado, y por ello la balanza comercial bilateral se ha tornado deficitaria en contra nuestra.


Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el déficit comercial con Argentina subió desde 82 millones de dólares en el 2006, hasta 168 millones en el 2007, y a 236 millones en el 2008, bajando a 194 en el 2009 y a 146 millones de dólares en el 2010.


Estos déficits se registraron contabilizando el gas natural.


Pero, ¿qué pasaría si se desgasificara la relación bilateral? El déficit en contra nuestra bordearía los 3.000 millones de dólares entre el 2006 y mayo del 2011.


¿Por qué es importante esta consideración? Para hacer ver que no se cumplió con las promesas y sueños de vender a la Argentina “como locos”, y, para no “encandilarse” con las estadísticas.


He aquí la evidencia: en 2010, Bolivia vendió 158 bienes a Argentina, de los que -uno solo- el gas representó el 92%.
Por su parte, Argentina nos vendió 2.556 bienes por 699 millones de dólares.


Si encima de ello -en todo su derecho- Argentina decidió limitar el comercio fronterizo bilateral, habrá que sumar a tal déficit, el contrabando hormiga desde el vecino país, ya que nosotros casi lo promovemos.

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