En esa carta, a la que tuvo acceso este medio, la empresa PIL Andina informa a los productores lecheros que pagará la deuda de dos quincenas y nos las tres que se demandan. “Comunico a ustedes que ayer se abonó el pago de la leche correspondiente a la segunda quincena de enero 2016, asimismo, confirmamos que escatimando esfuerzos por la situación que es bien conocida por ustedes, el pago correspondiente a la primera quincena de febrero será cancelado el lunes 14 de marzo”, señala la carta firmada por Vallejo.
Entrevistado en La Paz y sin referirse directamente al conflicto surgido el lunes en esta ciudad, Vallejo afirmó que hay deterioro financiero en la empresa debido a que el precio de exportación de la leche está a la mitad del costo de producción.
Respecto a los 3,70 bolivianos que se paga a los productores por el litro de leche, indicó que es “mucho más caro” de lo que se paga en otros países.
“Con el costo actual de la materia prima, producir una tonelada de leche en polvo nos está costando entre 4.200 y 5.000 dólares dependiendo de la planta en la que se realiza y la leche que se utiliza (…); pero la leche en el mercado internacional está en un precio promedio de 2.000 dólares (la tonelada”, explicó.
Vallejos citó a la caída de los precios internacionales, la invasión de productos de contrabando y la sobreproducción como los detonantes de la “situación difícil” que actualmente atraviesa el mercado lechero, tanto en el ámbito nacional como internacional.
“Estamos trabajando ya desde hace varios meses en forma conjunta con las autoridades y con los productores de leche para desarrollar un plan de contingencia, pero lo que sí está claro es que la situación, como está, no es sostenible”, añadió.
Contrariamente a ese panorama, el presidente de la Federación Departamental de Productores Lecheros (Fedeple), Jhasmany Medrano, afirmó que a nivel nacional e internacional “hay un equilibrio” en la producción y comercialización por lo que la situación es estable en su criterio.
“Para nosotros es un perjuicio total porque hay muchos compromisos a nivel del sector lechero, compromisos y deberes con las entidades financieras y con los que nos proveen insumos”, acotó.
Los productores lecheros cumplieron ayer el segundo día de huelga de hambre y radicalizaron sus medidas crucificándose en puertas de PIL Andina exigiendo que la empresa les pague los 84 millones de bolivianos por la leche que entregaron durante tres quincenas. La carta que se les envió ayer no hace referencia al pago de la tercera quincena.
Alrededor de 50 dirigentes lecheros ingresaron el lunes en el primer día de huelga de hambre, mientras que ayer cinco personas, dos hombres y tres mujeres (una acompañada de un bebé), se crucificaron exigiendo que PIL atienda su pedido.
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