Laboratorios Agronat llegará por primera vez a ultramar con el desintoxicante y curativo jugo de sábila y el respaldo de su producción orgánica triplemente certificada, con la que también está presente en el mercado peruano y lo estará en el brasileño.
La empresa tiene cinco líneas de producción: capilar (Penkaloe), cosmética facial y corporal (D’aloe), suplementos alimenticios (Power Inn), jugos de sábila (Pharmanat) y alimentos (¡Qué gusto!). Estos productos llegan a todo el país, con excepción de Beni, precisó la gerente general de Laboratorios Agronat, Ángela Gonzales.
La empresa cuenta con un sistema de producción moderno y certificado con la ISO 9001/2008, de gestión de calidad; con la ISO 22000, de inocuidad alimentaria; y con una certificación orgánica, que garantiza el origen de sus materias primas. Con estos tres reconocimientos respalda la calidad e inocuidad de sus productos y participa en ferias internacionales que le abren las puertas de nuevos mercados.
RECORRIDO. “Vimos que todos los productos bolivianos tienen más oportunidades en el mercado orgánico mundial por su cualidad natural garantizada (...). Nosotros tenemos un pedido para exportar jugo de sábila a Alemania” en los próximos dos meses, anunció Gonzales, quien agregó que Agronat ya lleva su mercadería a Perú, desde el año 2014, y que su siguiente objetivo en la región es Brasil.
El jugo viene en tres presentaciones (normal, dietético y extra calcio), tiene propiedades desintoxicantes y se emplea para coadyuvar a la curación de enfermedades como la gastritis, úlceras y estreñimiento, así como en procesos de inmunodepresión.
“Estamos un año y medio esperando la aprobación del exigente registro sanitario de la Anvisa (Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil), pero ya estamos en lo último... Luego de obtener ese permiso, podremos entrar a un gran mercado”, manifestó.
La planta de Agronat, ubicada en la población de Huajchilla (en el municipio paceño de Mecapaca), cuenta con ambientes que mantienen los productos sanitizados. Se invierte constantemente en maquinaria, tecnología y materia prima de calidad.
La tecnología e infraestructura de la planta requirió de una inversión cercana a los $us 3 millones, afirmó Milton Gonzales, fundador y presidente ejecutivo de Agronat, que tiene como socios a quienes trabajan en la empresa hace más de 15 años. “Hace años, cuando Agronat entró en crisis, estábamos a punto de cerrar la empresa, pero los trabajadores no lo permitieron y una forma de pagar su ayuda fue convertirlos en socios”, recordó.
Hoy, la empresa fundada en 1992 utiliza insumos naturales cultivados a más de 3.800 metros sobre el nivel del mar, como la quinua y otros productos andinos y del valle como el amaranto, el tarwi, el willkaparu, la penka de la tuna, el maíz y la soya, además de plantas aromáticas como el cedrón, la khoa, el molle, el romero, la salvia y la caléndula, entre muchos otros.
Los industrializamos “de manera que estos productos vayan sustituyendo lo (artificial) que tenemos en el mercado”, dijo el emprendedor.
Otro de los productos estrella de la empresa es el aloe, “un producto que tiene propiedades anticancerígenas” y que elimina del cuerpo los metales pesados. “Esta historia empezó cuando vi en el campo a una señora que se lavaba el cabello con un producto que no estaba embotellado. Le pregunté, qué era, y me respondió, ‘la penca de la tuna’ y que (en su comunidad) solo usaban ese shampoo natural”, contó.
Este encuentro fue el origen del primer artículo producido por Agronat: el Penkaloe, un shampoo que contiene extracto de la penka de la tuna, aloe vera y la saponina de la quinua.
Ventajas de la oferta
Precios
Los precios de los productos de Agronat están entre los Bs 25 y 350. La gerente general de la empresa, Ángela Gonzales, detalló que el Power Inn de 2 kilos vale Bs 350, mientras que un producto extranjero similar, Nitro, tiene un precio de Bs 696 ($us 100), lo que da ventaja al producto nacional.
Agricultores recuperan ‘saberes ancestrales’
Para asegurar su producción orgánica, Agronat fideliza y capacita a los productores agrícolas que le venden materia prima, recuperando “saberes ancestrales” aplicados a los cultivos.
El presidente ejecutivo de Laboratorios Agronat, Milton Gonzales, dijo que las técnicas de cultivo orgánico cuidan la salud de los propios agricultores. “Aprendimos cómo aplicar en la actualidad la forma de cosechar que tenían nuestros abuelos. Para esto, tenemos técnicos, ingenieros y agrónomos que los capacitan”.
PROCESAMIENTO. Estos conocimientos se relacionan principalmente con la cosecha manual de los productos para la empresa, lo que permite mantener las propiedades íntegras de los vegetales.
“La incorporación de pesticidas y maquinaria a la agricultura ha espantado a los achachilas (espíritus de la energía) por lo que estos alimentos carecen de ajayu (alma) y es por esta razón que las personas se enferman, porque ingieren alimentos vacíos”, afirma la empresa en su página web.
Gonzales resaltó que al “hablar” el mismo idioma de los productores, éstos optan por quedarse con Agronat, ya que la empresa no exige cambiar sus tradiciones en la cosecha. “El ejemplo es que trabajamos con 17 comunidades y más de 380 personas, la cual es una cantidad respetable”.
Agronat “es una empresa que genera 56 fuentes de trabajo” directas y 450 indirectas, destacó.
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