"El alza de las importaciones de alimentos ocasiona la caída de precios en el mercado interno. La compra de alimentos provoca pérdidas a los productores, desincentiva la producción agrícola y reduce la inversión", precisó Gary Rodríguez desde el IBCE.
Según Rodríguez, la devaluación de la moneda en Brasil y Argentina influyó en la importación de alimentos, especialmente en la de arroz y harina de trigo.
Los datos oficiales señalan que en 2010 la importación de alimentos alcanzó a $us 357,3 millones, mientras que el año pasado llegó a 689 millones.
El Instituto Nacional de Estadística reportó que de enero a mayo de este año las compras llegaron a los 219,8 millones de dólares.
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