El canciller David Choquehuanca aseguró ayer que la entrega de las botellas, que llevan la imagen del Santo Padre y el lema “Bienvenido papa Francisco”, se la realizará de manera gratuita.
El anuncio fue hecho en la Cancillería del Estado tras la posesión a los embajadores bolivianos para el Ecuador y el Vaticano, Juan Enrique Jurado y Armando Loaiza, respectivamente.
“Hay mucha gente que está esperando al Papa y nosotros hemos querido recibirle con nuestra aguas del Silala y compartir, darle la bienvenida”, indicó Choquehuanca en una charla con los periodistas.
El Ministro de Relaciones Exteriores informó que la presentación oficial del agua mineral para recibir al vicario de Cristo se realizará en las siguientes horas.
“Las aguas (embotelladas) del Silala no sólo se las entregaremos al Papa, sino a todos. Todos vamos a beber las aguas del Silala”, complementó el jefe de la diplomacia en Bolivia.
La cantidad de botellas de la “agua de la soberanía” no fue precisada, “son miles, miles y miles”, dijo.
La preparación de botellas de aguas del Silala cobra relevancia debido a que la propiedad del recurso hídrico del manantial es otro de los temas de diferendo entre Bolivia y Chile.
El manantial Silala nace en el sur boliviano y fue canalizado artificialmente hacia el norte chileno a principios del siglo XX, por lo que Bolivia acusa a Chile de usar las aguas del afluente de manera gratuita. Según cálculos bolivianos, el Silala surte cerca de 204 a 205 litros por segundo.
En 2011, ambos gobiernos alcanzaron un preacuerdo, donde se determinó que Chile pagaría por el consumo de hasta un 50% de las aguas del Silala, mientras se realice un estudio para establecer el origen de todo el afluente. Sin embargo, esto no se materializó por protestas cívicos bolivianos. (Oxígeno)
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