Un ampliado del sector determinó ayer un cuarto intermedio hasta el 31 de mayo en las movilizaciones contra la supresión del subsidio a la harina.
El artículo de primera necesidad será elaborado con el producto subsidiado que el sector mantenía almacenado.
La medida fue levantada luego de que la ministra de Desarrollo Productivo, Verónica Ramos, dijo a radio Panamericana que convocará al diálogo si el sector levanta el paro.
El secretario ejecutivo de la Federación de Panificadores de La Paz, Félix Quenta, señaló que esperarán la convocatoria de la ministra tras ese anuncio.
"En todo lugar habrá pan a 40 centavos, que en los cuarteles han hecho y han vendido en Emapa vamos a hacer. Nos han dicho que ese pan (redondo) es de batalla y desde mañana (hoy) habrá en todas partes. Hemos aprendido la lección, vamos a seguir su ejemplo”, afirmó.
Sin embargo, afirmó que la marraqueta desaparecerá de los mercados y tiendas. "Será hasta que nos den un precio real. Queremos un estudio real de los costos de producción”, enfatizó.
La marraqueta se caracteriza porque no requiere manteca, sino sólo harina, sal, levadura, azúcar y agua. Pero su elaboración demanda más tiempo, más esfuerzo físico, requiere más fermentación y técnica para que sea crujiente, explicó el panadero Rafael Espinoza, quien tiene su establecimiento en Villa Fátima.
A partir de hoy los panaderos solo venderán el "pan surtido”, que es una pieza redonda, casi plana, de menor gramaje que la marraqueta y que tiene una leve capa de queso, entre otras características. También elaborarán las caucas crujientes y los cuernitos. El "pan surtido” contiene más manteca.
El viceministro de la Micro y Pequeña Empresa, Martín Basurco, en conferencia de prensa, afirmó que no permitirán que los panificadores elaboren y vendan "pan especial” con harina subvencionada. "No pueden salir a vender el pan con otros precios o sólo especial, es decir, no elaborar el pan de batalla”, aclaró.
La autoridad subrayó que luego de una "evaluación” a la venta del pan se convocará al diálogo.
"Eso implica no solamente volver a producir pan y suspender la movilización, sino hacerlo en los términos y las condiciones en las que se realizaba antes del conflicto”, añadió la autoridad.
El conflicto
Los panaderos de La Paz declararon un paro de 48 horas en rechazo a la eliminación del subsidio a la harina; la medida se cumplió en seis regiones del país. Exigen que suba el precio del pan de batalla a 50 centavos. La huelga causó escasez en las tiendas y Emapa vendió el producto elaborado por las Fuerzas Armadas a 40 centavos.
Sin embargo, la estatal sólo comercializó pan redondo, que en criterio de algunos consumidores tiene menor gramaje.
"Los panes son pequeños y no son iguales a los de las tiendas. No tienen quesito encima. Lo peor de todo es que se acaba muy rápido”, afirmó Teresa Maldonado, vecina de San Pedro
El costo de producción del pan de batalla
Ganancias El Gobierno afirma que si los panaderos elevan a 50 centavos la unidad del pan de batalla obtendrán ganancias superiores a los 6.000 bolivianos. Los productores dicen que sólo ganan 19,50 a 30 bolivianos por quintal.
Costos Los panaderos exigen al Gobierno un reajuste al costo de producción. Quieren que se incluya el precio de la harina importada y la nacional.
Intermedio Si hasta el 31 de enero no hay diálogo con el Gobierno, los panaderos advirtieron con el reinicio de las movilizaciones y otro paro que será determinado en un ampliado.
Huelga El paro nacional de los panaderos fue calificado de exitoso.
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