En Tarija, cerca de 25 funcionarios del Control Operativo Aduanero (COA) deben hacerse cargo de controlar y patrullar los cientos de kilómetros de frontera que unen a Bolivia con Argentina, zonas por donde ingresa el contrabando. El escaso personal motivó a la Aduana Nacional a que requiera el apoyo del Ejército para combatir el tráfico ilegal de productos. Consecuentemente cerca de 30 efectivos entre soldados e instructores se sumaron al control.
Entre las jurisdicciones de control que tienen los agentes del COA están la frontera de Yacuiba, Villa Montes y Bermejo. Ambas se hallan cerca de Argentina y Paraguay. En la ruta hacia el norte los controles se ubican en Pajchani y Falda La Queñua. Los productos ingresan por la frontera de Villazón en el departamento de Potosí, que también colinda con Argentina.
Desde el COA de la ciudad de Tarija, aseguraron que el personal no es el suficiente, pero a pesar de ello, están realizando una serie de operativos que les permiten combatir el contrabando. Reconocen que el apoyo militar es importante para realizar los trabajos de control a favor del Estado.
Los controles que vienen ejecutándose se realizan durante todo el día en motorizados y en puestos fijos. Los uniformados aseguran además ser víctimas constantes de las amenazas y de agresiones por parte de los contrabandistas.
El comandante del regimiento Moto Méndez, teniente coronel Heber Javier Roswer, indicó que el trabajo de control obedece a instrucciones superiores del Comando General. En algunos casos, para hacer intervenciones se mueve toda una sección de uniformados compuesta por 30 personas y en otras sólo una escuadra de nueve.
“Somos un comando operacional que trabajamos en todo el sur de Bolivia, tenemos una camioneta que nos sirve para patrullar aunque la misma es insuficiente para llevar a todo el personal—indicó Roswer--. Nosotros nos movilizamos dependiendo de la operación que vayamos a manejar, podemos mover desde una escuadra hasta una sección”.
El jefe militar indicó que en los operativos realizados en la presente gestión permitieron incautar dos camiones de contrabando, además del secuestro de productos en vehículos pequeños procedentes del norte del país. La intervención por lo general se realiza durante las noches y parte de la madrugada.
El gerente de la Aduana, Paul Castellanos, aseguró que es insuficiente el personal que tiene el COA. Reconoció que la extensa frontera impide un control efectivo del contrabando, pero pese a las limitantes existentes los resultados fueron satisfactorios.
Marlene Ardaya, presidenta de la Aduana Nacional de Bolivia (ANB), en declaraciones al periódico El Deber, solicitó el compromiso de la Asamblea Legislativa Plurinacional para incrementar ítems para el COA, que solamente posee 150 efectivos para cubrir 6.894 kilómetros de frontera en el país.
Aduana entregó al Estado 202 toneladas de productos
La Aduana Regional de Tarija adjudicó 202 toneladas de productos incautados de contrabando a los ministerios de la Presidencia y Salud, por un valor aproximado de 3.800.000 bolivianos. Los productos entregados son comestibles y abarrotes como arroz, harina, azúcar, fideo, entre otros.
Las cifras oficiales reflejan que en la presente gestión se destruyeron 406 toneladas de mercadería que no era apta para el consumo, ni uso. El monto aproximado en dinero asciende a los 3,5 millones de bolivianos.
Entre los productos están arroz, harina, azúcar, fideo, además de bebidas alcohólicas, gaseosas y productos de limpieza entre otros.
El gerente de la Aduana, Paul Castellanos, indicó que los resultados son satisfactorios, asegurando que los ingresos de la Aduana aumentaron en más de un 30 por ciento.
“Tenemos un balance positivo y tenemos muchas deficiencias y falencias—indicó--. Pero en cumplimiento de metas, estamos en niveles aceptables”.
En cuanto a las incautaciones de vehículos indocumentados, se retuvo a 158 en total. Los mismos también fueron entregados al Gobierno y son ellos quienes disponen de todo los entregado.
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