El pasado sábado, el Mandatario advirtió que no dudará en ordenar la nacionalización o estatización de la fábrica de calzados Manaco, en Cochabamba, si se comprueban las denuncias de los dirigentes sindicales de un eventual desmantelamiento de la empresa o se constata la violación de los derechos laborales.
El presidente de la Brigada Parlamentaria de Cochabamba, Samuel Pereira; el secretario general de la Federación de Fabriles de Cochabamba, Mario Céspedes, y el presidente del Comité Cívico de Quillacollo, Juan Carlos Irahola, respaldaron esta posible medida ante cualquier daño contra los derechos de los trabajadores, reportó ANF.
Pereira remarcó que la fábrica se instaló en Quillacollo en 1944 y que en sus mejores épocas tuvo más de 1.500 trabajadores que contribuyeron al desarrollo del departamento. Actualmente son más de 500 obreros. El producto nacional era destinado a los mercados externo e interno
"Manaco recientemente cumplió 70 años de fundación y ahora merece todo el respeto y apoyo de los cochabambinos y bolivianos, debido a que, según informes oficiales, se procedió al desmantelamiento sistemático de algunos talleres y la amenaza de su traslado a otro país”, afirmó Pereira
Céspedes dijo que plantearán al Gobierno que se haga una inversión con el fin de salvar Manaco de un "inminente” cierre a causa de la competencia desleal del contrabando, que hizo caer la producción de calzados.
También se gestionará ante la Gobernación y el Concejo Municipal la declaratoria de Manaco como "patrimonio industrial, cultural y sindical de Cochabamba.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario