Desarrollo. La marca Coral está en Bolivia desde hace 44 años. El inicio fue a través de la importación de los productos de esta marca desde Brasil, por parte del Grupo Ribepar.
El desarrollo que experimentó el mercado boliviano permitió que en 1994, esta industria brasilera instale en Santa Cruz una planta para la producción local de pinturas.
Así fue que Coral logró posicionarse en Bolivia, de la mano del Grupo Ribepar, distribuidor exclusivo para el país.
"Nuestra misión es llevar colores a la vida de las personas, y nuestra posición en el mercado es el reflejo de una labor permanente en la búsqueda de la mejora continua", indicó Angelino Mancini, Company Manager de Pinturas Coral.
Ciudad dinámica. Para Coral, Santa Cruz es una ciudad atractiva para los negocios relacionados con la construcción civil. "Es dinámica, con un ritmo de crecimiento impresionante", destacó Mancini.
Sin embargo, también considera importante mejorar la infraestructura vial y de servicios para que sea más atractiva a los inversionistas del exterior.
Emprendedor y exigente. Las más de cuatro décadas presente en Santa Cruz, autorizan a Coral para hablar del cruceño. "Como empresario es bastante emprendedor y como cliente debe ser más exigente, pues induce a la mejora en los servicios y en la calidad de productos", indicó Mancini. "Pero creo que la informalidad es perjudicial para todo el país”, concluyó.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario