Zapatos chinos patean duro a los nacionales

Hace tres años que los calzados chinos ingresaron con fuerza a Bolivia y tienen en jaque a la producción nacional que bajó significativamente este último año. Esto se debe a las grandes cantidades que llegan del país extranjero y a precios bajos. Esta situación ocasionó el cierre de muchos talleres en el territorio nacional.

Competencia injusta. La diferencia de precios de los calzados chinos a los nacionales es abismal, la docena de zapatos chinos cuesta 900 bolivianos y los nacionales 1.100. El costo de este último mucho depende del material en el que esté trabajado, mientras que el precio por calzado, en el caso de las sandalias van desde los Bs 70, a diferencia del chino que se encuentra desde Bs 40.

Mano de obra y materia prima subieron el doble. La mano de obra que antes costaba Bs 140 por docena, ahora sale a 350, lo mismo pasa con la materia prima, por ejemplo, una lonja de cuero nacional de segunda cuesta $us 50. La mayoría de los materiales llega del Brasil, Colombia, China y recientemente Perú, como son casas legales las importadoras todo llega con un alto costo al productor.

Productores desmotivados. La propietaria de calzados Marilú, María Luisa Rosas, manifestó que los socios del rubro están cansados de las reuniones porque el Gobierno no los toma en cuenta. “Todos mis puntos de venta que tenía a nivel nacional se cerraron porque no hay salida, no es justo que en este Gobierno que dice apoyar a los chicos, estemos a punto de desaparecer“, dice, Rosas.

En este contexto Fidel Vargas, productor de calzados, lamenta que el Gobierno no esté haciendo nada por detener el contrabando y que mucha gente se está enriqueciendo con esto. “Hemos pedido apoyo pero ni el Gobierno ni la Gobernación nos dan respuesta, estamos viviendo del día y con el tiempo los chinos (productos) nos harán desaparecer”, apuntó Vargas.

Asimismo, Julio Vargas, dedicado al mismo rubro, señala que se advirtió a las autoridades de los problemas que empezaban a tener, se hicieron marchas pero no se consiguió nada. “Tuve que cerrar mi taller hace dos años, las ventas cayeron un 70%, de las 100 docenas que vendía antes por semana a lo último solo pude vender cuatro docenas", dijo Vargas.

Cadepia en busca de soluciones

El vicepresidente de Cadepia, Guido Vargas, aseguró que se está buscando alternativas para dar solución al problema por el que están pasando no solo los productores de calzados, sino también otros. Son muchos los rubros que están al borde de la quiebra por la entrada sin medida de productos chinos y el problema del contrabando. El vicepresidente subrayó que es difícil competir con esta clase de productos, por la falta de industrialización. Asimismo, resaltó la necesidad que tienen los sectores en capacitaciones técnicas para mejorar los productos, modernización de maquinarias para bajar costos y así producir más. "Además, lo difícil es conseguir crédito del Banco de Desarrollo Productivo si se debe a otra entidad financiera. Se van a tocar diferentes puntos para poder llegar a un acuerdo con el Gobierno", remarcó Vargas.