Pese a la despenalización del ‘acullico’ de la hoja de coca, este producto continúa penalizado y su exportación en estado natural o como base de productos sigue sancionada por la legislación internacional.
César Guedes, representante de la Oficina de las Naciones Unidas para el control de las Drogas y la Prevención del Delito (Onudd), aclaró ayer que la hoja de coca continúa penalizada, por lo que este producto, incluyendo sus derivados, no podrá ser exportado.
El representante de la organización internacional pidió a los gobernantes de Bolivia que aceleren el estudio sobre el consumo de la hoja de coca en el país, recordando que la misma debería haber sido presentado el 2009 para conocer de manera oficial la cantidad de coca que destinan los productores para el ‘acullico’, por lo que el Gobierno deberá seguir peleando en la erradicación de la hoja excedentaria.
De acuerdo con Guedes, el retorno de Bolivia a la convención de Viena no faculta a los productores exportar la hoja de coca ni sus derivados, porque las leyes internacionales prohíben la internación de este producto a otros países.
El representante de la Onudd aclaró que el hecho de que el país haya vuelto a la Convención no representa la libre circulación de la coca, porque para esta instancia internacional la hoja sagrada sigue siendo una sustancia controlada, lo que quiere decir que tampoco se debe incrementar las plantaciones en las zonas no tradicionales.
Lo único que en el momento se ha logrado despenalizar para la Onudd es el masticado de la coca, pero solamente en Bolivia y no así a nivel internacional porque para otros países y sus leyes continúa vetada el consumo.
“La comunidad internacional apoyó a Bolivia, sólo para la comercialización dentro de su territorio, mientras que no está liberada para la venta en el exterior y menos su consumo en otros países”, explicó Guedes.
Con relación a la industrialización de productos derivados de la coca, César Guedes aclaró que no podrá ser posible su exportación, debido a que uno de los requisitos para el efecto es que se extraiga el alcaloide, uno de los químicos que tiene este producto que es esencial para la fabricación de la cocaína, exigencia que podría representar una alta inversión económica.
Advirtió que la comunidad internacional todavía está preocupada, porque espera que Bolivia cumpla y respete los acuerdos de erradicación, aunque Guedes, también aplaudió que en los últimos meses de 2012 se notó de manera clara la reducción de la siembra de la coca y la lucha con el narcotráfico.
Solo 15 países, entre ellos Estados Unidos, se han opuesto a la salvedad planteada por Bolivia sobre el ‘acullicu’, vetado por el organismo internacional para aceptar su retorno a la convención.
Habría sido necesaria la oposición de al menos 61 de los países miembros de la Convención de la ONU para frenar la solicitud.
Las declaraciones del funcionario internacional matizan las del presidente boliviano, Evo Morales, quien hoy en un discurso ante una multitud de sus bases dijo que se trata de un triunfo para “que el mundo reconozca que la hoja de coca no es veneno, que la hoja de coca no es estupefaciente” y que sus cultivos son legales.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario