El valor de las ventas de productos manufacturados de Bolivia al Mercosur, de enero a septiembre de 2012, llegó a 157 millones de dólares, mientras que las exportaciones a la CAN ascienden a 887 millones de dólares (ver gráficos), de acuerdo con datos del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
Para el experto en comercio exterior Julio Alvarado, “al elegir entre el Mercosur y la CAN, naturalmente las cifras nos dicen que hay que quedarse en la CAN”, puesto que Bolivia ya le vende a los principales mercados del bloque sureño los productos que ellos demandan, en particular gas natural.
De hecho, las exportaciones a Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay -miembros del Mercosur- hasta septiembre de este año llegan a 4.032 millones de dólares; 3.877 millones de dólares corresponden al gas natural vendido a Brasil y Argentina.
El presidente Evo Morales señaló el jueves que está de acuerdo con la propuesta de los embajadores de los países del Mercosur, quienes expresaron que Bolivia debe ser miembro pleno de ese organismo de integración.
El vicepresidente de la Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia (CANEB), Guillermo Pou Munt, argumentó que “el Mercosur representa un mercado casi íntegro para el gas boliviano; las exportaciones de productos de valor agregado son pequeñas y tienen pocas probabilidades de desarrollarse porque, en esos mercados, muchos de ellos ya se producen”.
Según el gerente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Edilberto Osinaga, la producción de Brasil y Argentina representa una competencia a gran escala para la boliviana; recomienda, por tanto, que debe evaluarse a fondo qué perdería Bolivia en la CAN y qué necesita para competir con los colosos de Sudamérica.
Alvarado enfatizó que las dos economías más grandes del Mercosur, Brasil y Argentina, “son proteccionistas e impiden que los productos bolivianos ingresen”; destacó que Bolivia ya tiene un acuerdo firmado en 1996, mediante el cual se creó un área de libre comercio con ellos, pero que “no funcionó en beneficio de las manufacturas bolivianas”.
El gerente del IBCE, Gary Rodríguez, complementó que ingresar al Mercosur implica dejar la CAN, ya que “la tarifa externa común de la primera choca con el arancel externo común de la segunda; Bolivia tiene que decidir por uno o por otro bloque”.
Esa medida perjudicaría además los intercambios comerciales con países de otras regiones e incluso provocaría el encarecimiento de los artículos producidos por ellos y que ingresan al mercado interno a precio más accesible, gracias a los actuales aranceles, declaró Rodríguez.
La propuesta también surgió en los 90, en el Gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, “y causó fricción con el sector agropecuario y agroindustrial”, rememoró.
Claramente les digo que el ingreso al Mercosur significa incorporarse a un mercado de 600 millones de personas..
ResponderBorrarNo se puede comparar estar como asociado y ser miembro,eso es obvio. Como asociado y al no compartir la tarifa comun el acceso de los productos bolivianos es de hecho restringido.
La participacion plena no es inmediata y se hace progresivamente dando lugar a la industria local a adaptarse..claro! tendran que invertir para producir productos de mayor calidad y a menor costo..algo que los mal llamados empresarios ...obviamente..no les gusta.
Pero, es claro..un mercado de 600 millones a un verdadero empresario capitalista lo alegraria ya que las oportunidades de crecimiento son mucho, pero mucho mas grande que el ya maduro mercado de la CAN.
Hay que invertir en Bolivia, en sus empleados con entrenamiento en sus procesos de manufactura..y crecer!
SoyUnasur