domingo, 20 de mayo de 2012

Contrabandistas usan veleros para circular mercadería por el Titicaca

“El lago Titicaca es grande y cualquier orilla que tenga conexión con cualquier camino de herradura es un lugar ideal para embarcar o desembarcar contrabando. De estas orillas salen los veleros peruanos y llegan al país por la península boliviana de Taraco”, denunció el comandante del IV Distrito Naval Titicaca, capitán de Navío José Quispia.

El denominado Lago Sagrado de los Incas es compartido por Perú y Bolivia y tiene un área de 8.562 km2. El cuerpo de agua se encuentra a una altura promedio de 3.810 metros sobre el nivel del mar y está considerado como uno de los más altos del mundo.

Antes de que las FFAA ingresaran a la lucha contra el contrabando, los comerciantes utilizaban la población de Desaguadero y otros caminos de herradura a lo largo del río del mismo nombre para llevar alimentos y combustibles hacia el vecino país. Quispia indicó que la institución castrense efectúa constantes patrullajes por el sector. Sin embargo, dijo que la cantidad de combustible asignado no es suficiente para realizar un control más riguroso en la frontera.

“Necesitamos más apoyo para realizar un control permanente en la región, sobre todo en la noche cuando efectúan la actividad”, añadió el jefe militar. Aseguró que frente a esta situación se están realizando las gestiones necesarias para reforzar el control.

Quispia indicó que la península de Taraco, ubicada en la región sur del lago, es extensa y es un sitio “por donde ingresa y sale bastante contrabando”.

Dijo que las naves peruanas, a diferencia de las nacionales, son más grandes y tienen una mayor capacidad de almacenaje. Precisó que las embarcaciones tienen 20 metros de eslora (longitud de la nave) y entre 5 a 8 metros de ancho.

Indicó que se tiene información de que los contrabandistas llevan en los veleros alimentos básicos e introducen al país productos peruanos, como sillas y otras mercancías de plástico. Precisó que la ruta no es usada con frecuencia “a la luz del día”, sino durante los horarios nocturnos.

En abril, el Comando Conjunto Andino de las FFAA se incautó de 30.430 litros de diésel, 255 litros (l) de gasolina, 270 l querosene y 48 garrafas de Gas Licuado de Petróleo (GLP) en varios operativos realizados en poblaciones fronterizas con el Perú. Además comisaron 163 quintales (qq) de arrocillo, 35 qq de harina, 26 qq de azúcar, 1.000 unidades de aceite comestible y cuatro cajas de cigarrillos.

El 18 de diciembre, La Razón difundió un reportaje que da cuenta del masivo contrabando de productos bolivianos al Perú.Según las autoridades peruanas, caravanas de hasta 80 camiones con contrabando de GLP, azúcar, maíz amarillo y electrodomésticos ingresan desde el lado boliviano con destino a Juliaca (Perú).

A esta ciudad peruana llegan los camiones a casas particulares, para luego repartir la mercadería en tres grandes mercados que están instalados en el centro. Los contrabandistas recorren caminos de herradura para llevar alimentos y carburantes hacia Perú y así burlar los controles de la Aduana y del Ejército. “Estos (contrabandistas) utilizan la población de Guacuyo para sacar la mercadería, luego pasan por una carretera hasta llegar a cercanías de la población de Kasani”, explicó el capitán Quispia.

En tanto, el Comandante del Regimiento de Caballería V de Guaqui, general Julio Tamayo, indicó que estas personas van por “Viacha y Villa Adela hacia Ventilla para salir al Desaguadero”.

El comandante del Control Operativo Aduanero (COA), coronel Osvaldo Cabrera, dijo que también emplean el camino a Copacabana y otras rutas por el sector de Puerto Acosta (norte).

El estado registra pérdidas

Datos

Un informe del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) señala que el Estado pierde por el contrabando “más de $us 150 millones por tributos no recaudados y adicionalmente $us 150 millones por la salida ilegal de combustibles subsidiados

a países vecinos”.

Clanes familiares operan en la frontera

Aline Quispe

Existen clanes familiares que operan en la frontera boliviano-peruana para transportar e internar mercadería vía contrabando de ambos lados.Así lo hizo conocer el comandante nacional del Control Operativo Aduanero (COA), coronel Osvaldo Cabrera, quien además dijo que estos grupos familiares están bien organizados para realizar esta ilícita actividad.

El jefe policial explicó que una familia despacha la mercadería desde Bolivia, otra se encarga del traslado de los productos y una tercera recibe la carga en Perú. Cabrera añadió que el modus operandi se repite en el lado peruano.

“El contrabando se hace en una sociedad entre bolivianos y peruanos. Si uno pretende traer un producto de Perú hacia Bolivia, los bolivianos tienen que internar el producto al mercado y viceversa”, dijo el comandante del IV Distrito Naval Titicaca, capitán de Navío José Quispia.

Cabrera añadió que, según información con la que cuenta, “el contrabando se desarrolla como una actividad normal, particularmente en Puerto Acosta y todos los pueblos cercanos a las riberas del lago”.

Niños sacan diésel en sus mochilas

Los contrabandistas se dan modos para burlar el control de las FFAA.

Aline Quispe

Recientemente, las Fuerzas Armadas (FFAA) descubrieron que los contrabandistas utilizan a niños para llevar carburantes hacia territorio peruano. Indicaron que los menores no llevan cuadernos en sus mochilas, sino bolsas plásticas llenas de combustible (diésel).

Así lo dio a conocer el comandante del Regimiento de Caballería V Gral. José Miguel Lanza de Guaqui, general Julio Tamayo, quien además dijo que los contrabandistas incurren en este tipo de acciones debido a que el litro de diésel en el lado peruano cuesta entre Bs 12 y 14.

Tamayo también señaló que es frecuente que los bebés que aparentan cargar las mujeres en sus espaldas en aguayos sean bolsas pláticas denominadas “guagüitas”, las cuales son llenadas con diésel.

En abril, las FFAA se incautaron de 30.955 litros de combustible, de los cuales 98% era diésel. El comiso se efectuó en los distintos operativos realizados por el Ejército en las poblaciones fronterizas con Perú.

“Los combustibles bolivianos son muy cotizados en el lado peruano, especialmente el diésel y la gasolina. Por ello, existe un control estricto de cualquier tipo de carga”, explicó el general Tamayo.

Detalló que dichos controles se coordinan también con las autoridades de Desaguadero, el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) y las Aduanas de ambos países.

Otra forma en la que los contrabandistas realizan el ilícito, indicó el jefe militar, es “inventarse sitios ocultos en las carrocerías de los vehículos, donde se encontró bidones que tenían una capacidad de entre 10 y 20 litros de combustible”.

Añadió también que existen muchas personas, sobre todo mujeres de pollera, que intentan cruzar a la frontera peruana con una garrafa de Gas Licuado de Petróleo (GLP) al día. “Esta actividad intentan consolidarla de tres a cuatro veces a la semana porque una garrafa en Perú vale Bs 125”.

“Los contrabandistas intentan pasar al lado peruano todos los días y en cualquier horario, sobre todo en las noches. Sin embargo, existe un grupo de refuerzo para realizar el control nocturno (...). Se tiene información de que ellos circulan en vehículos medianos, además que buscan continuamente rutas para burlar el control”.

Más datos de comisos de líquidos

Registro

Las FFAA decomisaron en enero 16 mil litros de diésel en el puesto de control del Regimiento de Caballería V Gral. Lanza de Guaqui. Mientras, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) incautó 2.800 litros de combustible.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario