La exportación de muebles sufrió una caída del 30 por ciento como resultado de la escasez de madera en el mercado interno y porque el Gobierno de Estados Unidos no renovó el Sistema Generalizado de Preferencias (SGP), informó el director del Instituto del Mueble Boliviano, Waldo Ballivián.
Los productos que disminuyeron su venta son los muebles de jardín, plegables, puertas y pisos de madera. “De la producción total, el 80 por ciento sale de exportación, un 50 por ciento a Estados Unidos y 30% a Europa”.
Ballivián observó que debido a la falta de políticas contra la caída de exportación, Perú logró copar los dos principales mercados de Bolivia.
En comparación con 2010, el valor de las exportaciones de muebles alcanzó un valor de cerca de 40 millones de dólares, mientras que este año se espera llegar a 22 millones de dólares si se tiene en cuenta que la época de mayor demanda ya pasó, pues ese periodo está comprendido entre abril y agosto.
Los carpinteros. El secretario ejecutivo de la Central Única de Artesanos de Bolivia, Mario Salmón, dijo que alrededor de 500.000 carpinteros sufren el embate de la escasez de materia prima, y que dejaron de percibir ingresos a pesar de los pedidos.
Mencionó que el precio del pie cuadrado de ochoó subió de 6,50 a 16,50 bolivianos; la madera blanca, utilizada para la construcción, subió de 3,50 a siete bolivianos; la mara, de 2,50 a 22 bolivianos, mientras que el pie cuadrado de pino subió de 0,50 a ocho bolivianos, y el cedro, de 1,80 a 12 bolivianos.
Salmón dijo que el precio de un juego de comedor se elevó de 12.000 a 18.000 bolivianos; un juego de living, de 1.800 a 7.000 bolivianos. “Si no hay solución al contrabando de madera, vamos a intervenir las barracas, porque no podemos quedar sin trabajo”.
25 por ciento es la baja en las ventas de muebles en comparación a los primeros ocho meses de 2010, según un fabricante.
La mano de obra es otro problema. El propietario de la industria Muebles Sarmiento, Félix Sarmiento, manifestó que la baja producción del sector no sólo obedece al alza del precio de la madera, barnices y tableros, sino al incremento del costo de la mano de obra en un 80 por ciento. “Tenemos pedidos de las empresas, pero no podemos cumplir a causa de esos dos factores. No sólo nuestro sector está afectado, también la construcción”.
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