Los embates de la crisis económica mundial sobre las exportaciones bolivianas se sentirán con más fuerza en los rubros productores de textiles, oleaginosas y en el sector maderero, informó ayer la Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia (Caneb).
El presidente del gremio, Eduardo Bracamonte, explicó que las industrias textileras de toda escala serán uno de los sectores más afectados por la caída del consumo en los principales mercados de estos productos.
Bracamonte indicó que lo propio ocurrirá con las ventas de soya, que ya se han visto afectadas por el descenso de precios. En marzo, la Cámara de Industria y Comercio de Santa Cruz (Cainco) informó que el valor del producto había bajado en 17%.
El empresario añadió que el tercer rubro afectado es el de las manufacturas de madera, “por efecto de la crisis inmobiliaria que afecta a Estados Unidos”.
Para Bracamonte, “lo que hay es una disminución de la capacidad exportadora, por lo tanto hay una reducción de empleos”. La Caneb no es optimista en cuanto a las proyecciones para este año, pues calcula un decrecimiento de entre 30 a 40% en las exportaciones en general hasta el 2010.
De los tres sectores, la situación de los textiles y la madera se torna aún más crítica por las restricciones a las importaciones de estos productos que han impuesto algunos países vecinos como Ecuador y Argentina, para proteger sus mercados internos.
La viceministra de Comercio Interno y Exportaciones, Homayra Condarco, consideró que no debería causar sorpresa que otros países de la región adopten medidas similares, como protección a sus industrias ante la crisis.
Adicionalmente, los textileros han sido afectados por la suspensión de los beneficios de la Ley de Promoción Comercial Andina y Erradicación de Drogas (ATPDEA), que permitía al sector exportar sus productos con arancel cero al mercado estadounidense.
Por esta situación, la Caneb exteriorizó la necesidad de construir una agenda económica “seria y responsable” entre el Gobierno y el sector productivo.
Esta propuesta será planteada en una reunión que el sector sostendrá hoy con la ministra de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Patricia Ballivián.
Para los exportadores, un tema central que se debe abordar con el Ejecutivo es el acceso a mercados, dejando al margen intereses políticos, sectarios e ideológicos.
El sector también considera importante la adopción de una conciencia política exportadora a nivel de país. Bracamonte anunció que en la reunión se planteará impulsar talleres específicos para los industriales nacionales y para el rubro exportador. Agregó que en cada caso se abordarían temáticas diferentes, a saber, la protección de mercados y acceso a tecnologías, entre otras.
Bolivia analiza restricciones a importaciones
Tras conocerse que Argentina sumó un trámite para la exportación de productos a ese mercado, el Ejecutivo analiza la posibilidad de implementar algún tipo de restricción para los productos argentinos de importación, informó la viceministra de Comercio Interno y Exportaciones, Homayra Condarco.
No obstante, aclaró que antes de adoptar cualquier tipo de medida, el Gobierno recurrirá “al principio de negociación y de conciliación de postura entre países, para ver qué tipo de acciones podemos tomar en protección de la industria nacional”. Señaló que el tema debe ser analizado en 15 días y anunció que una comisión del gabinete trabaja el tema de las licencias y protección de la industria nacional.
El fin de semana, el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) denunció que las exportaciones de textiles a la Argentina se vieron dificultadas debido a que, además de pedir una licencia previa de importación, ese país sumó un trámite burocrático que debería demorar 60 días, pero en el caso boliviano demandó 120. Los productores bolivianos tuvieron que esperar cuatro meses para obtener la licencia de importación. Ayer se conoció que varios de los trámites que estaban paralizados fueron liberados.
El país vende a la Argentina 200 productos; 57 de ellos fueron afectados por las restricciones.
El presidente del gremio, Eduardo Bracamonte, explicó que las industrias textileras de toda escala serán uno de los sectores más afectados por la caída del consumo en los principales mercados de estos productos.
Bracamonte indicó que lo propio ocurrirá con las ventas de soya, que ya se han visto afectadas por el descenso de precios. En marzo, la Cámara de Industria y Comercio de Santa Cruz (Cainco) informó que el valor del producto había bajado en 17%.
El empresario añadió que el tercer rubro afectado es el de las manufacturas de madera, “por efecto de la crisis inmobiliaria que afecta a Estados Unidos”.
Para Bracamonte, “lo que hay es una disminución de la capacidad exportadora, por lo tanto hay una reducción de empleos”. La Caneb no es optimista en cuanto a las proyecciones para este año, pues calcula un decrecimiento de entre 30 a 40% en las exportaciones en general hasta el 2010.
De los tres sectores, la situación de los textiles y la madera se torna aún más crítica por las restricciones a las importaciones de estos productos que han impuesto algunos países vecinos como Ecuador y Argentina, para proteger sus mercados internos.
La viceministra de Comercio Interno y Exportaciones, Homayra Condarco, consideró que no debería causar sorpresa que otros países de la región adopten medidas similares, como protección a sus industrias ante la crisis.
Adicionalmente, los textileros han sido afectados por la suspensión de los beneficios de la Ley de Promoción Comercial Andina y Erradicación de Drogas (ATPDEA), que permitía al sector exportar sus productos con arancel cero al mercado estadounidense.
Por esta situación, la Caneb exteriorizó la necesidad de construir una agenda económica “seria y responsable” entre el Gobierno y el sector productivo.
Esta propuesta será planteada en una reunión que el sector sostendrá hoy con la ministra de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Patricia Ballivián.
Para los exportadores, un tema central que se debe abordar con el Ejecutivo es el acceso a mercados, dejando al margen intereses políticos, sectarios e ideológicos.
El sector también considera importante la adopción de una conciencia política exportadora a nivel de país. Bracamonte anunció que en la reunión se planteará impulsar talleres específicos para los industriales nacionales y para el rubro exportador. Agregó que en cada caso se abordarían temáticas diferentes, a saber, la protección de mercados y acceso a tecnologías, entre otras.
Bolivia analiza restricciones a importaciones
Tras conocerse que Argentina sumó un trámite para la exportación de productos a ese mercado, el Ejecutivo analiza la posibilidad de implementar algún tipo de restricción para los productos argentinos de importación, informó la viceministra de Comercio Interno y Exportaciones, Homayra Condarco.
No obstante, aclaró que antes de adoptar cualquier tipo de medida, el Gobierno recurrirá “al principio de negociación y de conciliación de postura entre países, para ver qué tipo de acciones podemos tomar en protección de la industria nacional”. Señaló que el tema debe ser analizado en 15 días y anunció que una comisión del gabinete trabaja el tema de las licencias y protección de la industria nacional.
El fin de semana, el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) denunció que las exportaciones de textiles a la Argentina se vieron dificultadas debido a que, además de pedir una licencia previa de importación, ese país sumó un trámite burocrático que debería demorar 60 días, pero en el caso boliviano demandó 120. Los productores bolivianos tuvieron que esperar cuatro meses para obtener la licencia de importación. Ayer se conoció que varios de los trámites que estaban paralizados fueron liberados.
El país vende a la Argentina 200 productos; 57 de ellos fueron afectados por las restricciones.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario