martes, 1 de noviembre de 2016

Devolución fiscal lleva años de gestión Exportadores cuestionan morosidad en Impuestos

La Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia (Caneb) reclamó ayer por el rezago de tres años que lleva el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) en la devolución de impuestos recibidos provisoriamente, a pesar que dispone de recursos superiores a lo que tramita el sector exportador.

Para este año, el Presupuesto General del Estado asignó Bs 1.700 millones destinados a la devolución de impuestos pagados, a través de los certificados de devolución tributaria.

PRÁCTICA COMÚN

Como se conoce, la devolución de impuestos es una práctica común en el comercio exterior de varios países, puesto que un productor para ser competitivo en precios, no puede exportar impuestos a los mercados internacionales, por lo que el Estado reembolsa los tributos pagados por aquél, por la producción de un bien exportable.

ASIGNACIÓN

El presidente del gremio, Guillermo Pou Munt, destacó que por primera vez en décadas el presupuesto asignado para la ejecución del Certificado de Devolución Impositiva (Cedeim) es mayor al monto que, de acuerdo a la economía jurídica vigente en el país corresponde favorecer a los exportadores.

PRESUPUESTO

“Hablamos de 1.700 millones de bolivianos (en promedio anual) eso es fabuloso, otra cosa positiva es que el presupuesto se está ejecutando completo todo el año, lo que había en 2014 se ha ejecutado, el 2015 se ha ejecutado y de 2016 se va a ejecutar, eso está bien” dijo.

INEFICIENCIA

Sin embargo, el dirigente empresarial declaró a la agencia de noticias ANF que el verdadero problema está en que la administración tributaria tiene un rezago de tres años en la ejecución de los certificados, es decir, que una solicitud de devolución de impuestos presentada al SIN en 2012 se hizo efectiva en 2015.

COSTO FINANCIERO

“El problema es el rezago en los trámites por tres años, no se debe manejar por montos, no es un tema de millones, el dinero de los exportadores está dando vueltas, el problema es en Impuestos Nacionales con los trámites; no es solo un cuello de botella, porque la forma en que hacen auditorías está ya fuera de la norma; meten el hacha, aplicando multas fuera de las normas”, aseguró.

Pou Munt añadió que el exportador no se queja, porque los mecanismos ante la Autoridad de Impugnación Tributaria involucran ámbitos judiciales, tiempo y dinero, que afectan mucho más al pequeño exportador.

FISCALIZACIÓN

“Y eso es porque Impuestos Nacionales ha enrarecido a tal grado el proceso de devolución impositiva que, por un lado, se hacen demasiado tarde las fiscalizaciones, que van mucho más allá de lo que deberían ir, y en las fiscalizaciones pelean peso a peso, por lo que ya no es devolución impositiva, es una lucha de titanes en un ring por cada dólar”, aseveró.

El dirigente exportador añadió que la nueva política del SIN es realizar inspecciones a las empresas que obtuvieron los Cedeim, cinco o seis años después, con el objetivo de hacerse devolver los recursos. “Basta con que te depuren el 40% de lo que te han devuelto entre multas, accesorios y la última ley (…) ese es el negocio, te pagan 100 luego te inspeccionan, te observan 40% y se hacen devolver el 120%”, indicó.

IMPARCIALIDAD

Según el presidente de la Caneb, la entidad de recaudación tributaria no actúa con imparcialidad hacia el sector exportador, que además de asumir un 32% más del costo por logística que los países vecinos, asume el Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 13% y no recibe la devolución del Impuesto a las Transacciones (IT) del 3%, desde hace 10 a 15 años.

TRAMITOLOGÍA

“No es que los exportadores no pagan impuestos, mientras que ustedes tienen su crédito fiscal y su débito fiscal y hacen su cálculo sin que nadie les moleste demasiado, los exportadores no podemos hacer eso, hay una serie de prácticas en el SIN diseñadas y cada vez se inventan más para afectar a nuestro sector”; aseguró.

DUDOSA INVERSIÓN

El presidente de la Cámara Nacional de Exportadores (CANEB), Guillermo Pou Munt, explicó que los productores privados piensan dos veces antes que adquirir nueva tecnología porque cuando ingresan una maquinaria al país que cuesta $us 100 mil puesta en el puerto de Arica, deben pagar el 13% del IVA. “El Estado le dice (al exportador) después va a recuperar, ¿pero cuándo?, cuando facture, cuando exporte, pero empiezan a observar por qué se pide crédito fiscal de hace tantos años, que no hay que pedir crédito fiscal del activo fijo, sino de la actividad corriente”, dijo.

CANEB informó que de acuerdo a las estimaciones del sector, el valor de las exportaciones caerá este año en más del 20% en relación al 2015. Aseguró que la estructura de las exportaciones no cambió en 10 años del Gobierno del presidente Evo Morales.

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